Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

El gladiador del surfing

Aritz Aranburu en Mundaka / FOTOS: Edu Bartolomé
Aritz Aranburu en Mundaka / FOTOS: Edu Bartolomé

Si calibramos el éxito de un deportista profesional tanto por sus logros en competiciones como por lo felices que ha hecho a sus seguidores, entonces podemos decir que Aritz Aranburu lo tiene todo. Porque no sólo nos ha hecho vibrar en competiciones de surf del más alto nivel, sino que también nos hace latir el corazón al ritmo de sus olas en cada vídeo que produce de sus continuos surfaris por el mundo.

Los ojos de Aritz Aramburu son claros. Brillantes. Tanto como sus palabras. Sobre todo cuando intentan transmitir su amor por el deporte con el que ha crecido hasta convertirse en todo un referente mundial. Y no es fácil condensar en media de conversación toda esa pasión por el mar, las olas, el deporte y la naturaleza que desprenden sus frases, aunque sus miradas y sus gestos también dan pistas de su entusiasmo por el surf.

Nos encontramos con Aritz frente al mar. Estamos en el Shelter Surf Bar, del que es dueño junto con la escuela del mismo nombre en la localidad guipuzcoana de Zarautz, de donde es natural. Aritz acaba de salir de una sesión de fotos del agua y se dispone a almorzar, y si algo no le sobra es tiempo, ya que en estas fechas se está celebrando el campeonato Surginf Pro de la localidad, en donde es toda una celebridad. Además, está colaborando con el evento Costa Rica te oxigena que se celebra etos mismos días en Zarautz. Su actitud tranquila puede llevar a engaño. Su porte sereno esconde a un auténtico gladiador del surfing, bregado en mil batallas en las olas más poderosas y temibles del planeta.

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

Qué aproveche Aritz. Cuéntanos un poco cómo ha ido el campeonato.

Siempre es agradable competir en casa. Es un campeonato que me hace mucha ilusión, es un campeonato que para mí ha sido siempre una referencia desde que empecé a surfear. Ver a los profesionales que venían aquí a competir una semana, y luego se iban a otra playa del mundo… ahora echo la vista atrás y noto que es algo que claramente me impactaba mucho y sin quererlo pues fue la semilla para que en el futuro me convirtiera en uno de ellos.

Tiene que ser una sensación especial ¿no?

Sin duda. Haberte convertido en una de esas personas que tanto admiraba cuando era pequeñito. Me acuerdo de un año que Taj Burrow ganó aquí, que en esa época era un chavalillo, mucho más joven de lo que yo soy ahora, que tengo 33 años, y era la época cuando él empezaba a surfear muy fuerte. De hecho ese año ganó el campeonato aquí y se clasificó para el WCT (la liga mundial de los mejores del mundo). Además fue el último año que se hizo con la familia Pukas, y cuando se volvió a hacer ocho años más tarde lo gané yo y también ese año me clasifiqué… al final a veces se siguen los pasos de otros en los que te fijas.

Sin embargo da la sensación de que poco a poco has ido dejando la competición más de lado ¿puede ser?

Hay mogollón de gente que me comenta esto. Yo creo que antes sólo se hablaba de mi faceta competitiva, que también era en el que más centrado estaba, lo hacía al 100%. Pero como desde hace unos años cuando no estoy compitiendo estoy viajando en busca de olas nuevas y a la aventura… me encanta viajar. Y mucha gente, como me tienen encasillado en la competición, cuando me ven viajar piensan que ya estoy a otras cosas. Pero lo cierto es que la competición me sigue motivando un montón, aunque sí que es verdad que soy mucho más selectivo, e intento elegir los campeonatos que más me gustan. Pero cuando me pongo la licra me sigue saliendo el gen competitivo.

¿Qué es lo que te atrae a elegir unos campeonatos frente a otros?

Me gustan los campeonatos en los que suele haber condiciones más potentes. Si hay tubos ya mejor. Pero los campeonatos que más me han gustado en mi carrera son Teahupoo (Tahití) y Pipe (Hawái); campeonatos en los que te olvidas de tu contrincante y estás compitiendo con tra las condiciones del mar. Al final son olas que todos los surfistas respetamos mucho, y en las que al final estás intentando hacerlo bien, pero también midiéndote a ti mismo.

¿Te quedan condiciones en las que medirte a ti mismo, o te tienes ya bien tomada la medida?

En cada viaje que hago siempre estoy intentando superar esos límites. Todavía me sigo sorprendiendo a mí mismo, y en el tema de las olas siempre estás buscando coger algo mejor de lo que has cogido hasta ahora, y al final es como una droga que te hace seguir viajando y seguir teniendo sensaciones de descubrimiento que tenías de chaval…

En cada viaje que hago siempre estoy intentando superar mis límites

¿Todavía quedan spots y olas por descubrir?

Sin duda. EL tema es que cuando la gente descubre un sitio pues se explota. Pero luego no hay tanta gente, por lo menos en el surf, que tenga ese espíritu aventurero. También lo normal es que si te gusta el surf y tienes un trabajo con un mes de vacaciones, lo que no quieres es arriesgarte a ir a un sitio a la aventura y que no haya olas. Yo tengo la suerte de vivir de lo que más me gusta y que me permite aventurarme a destinos nuevos en los que a veces hay suerte y sale bien y a veces no…

¿Con qué herramientas contáis para encontrar las mejores condiciones?

A día de hoy usamos mucho Google Earth para examinar orillas, donde puede haber olas… y luego webs de previsiones de oleaje y meteorología. Pero aun así cuando sales de viaje sigue siendo súper romántico, con las expectativas de no saber del todo qué te vas a encontrar o qué va a ocurrir. Y lo más importante es que salgan o no salgan las mejores condiciones, los viajes siempre son súper enriquecedores. Las olas a veces son la excusa, lo importante al final es el viaje. Y en muchas ocasiones hemos fallado, a lo grande además, y aun así te quedas con un buen sabor de boca con la experiencia.

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

¿Qué sitio del mundo te ha tocado más la fibra?

Se me hace difícil escoger un destino, porque cada sitio tiene cosas diferentes. Pero últimamente estoy viajando mucho a África, y todos los países que visito, las culturas que conoces, la gente… me llenan un montón. Los destinos con culturas muy marcadas, en los que aprendes más cosas, son los que más me gustan.

¿Y alguno pendiente que te llame mucho la atención?

Varios: Islandia lo tengo pendiente… Pero muchos, la verdad que muchos. Cuando veo el mapamundi –que tengo mapamundis por todas partes en mi casa- y veo islas pequeñas, rincones escondidos… siempre fantaseo con ello… Tengo ese chip de aventurero metido muy dentro y la verdad es que cuando paso más de dos semanas en casa ya estoy nervioso y con ganas de salir.

¿Dirías que el mar es un buen maestro?

Muy buen maestro. Me ha dado muchos valores que uso tanto cuando estoy dentro como fuera del agua. El mar te pone siempre en tu sitio. Te enseña paciencia, capacidad de adaptación a lo que te ofrece cada día la naturaleza… Valores que en tierra también sirven mucho.

El mar te pone siempre en tu sitio. Te enseña paciencia, capacidad de adaptación a lo que te ofrece cada día la naturaleza

Y de la competición ¿también se aprende?

Sin duda. Lo primero que aprendes al competir es a perder. Lo que es muy importante, porque al final tienes que aceptar que las cosas no son fáciles, y que si algo quieres algo te cuesta. Lo que he aprendido compitiendo lo usado como referencia en muchas cosas en mi vida.

¿Sigues pasando miedo en algunas situaciones?

Claramente. Todos tenemos nuestros límites y cuando se exceden el miedo hace acto de presencia. Respeto siempre hay que tener… pero en el agua, con condiciones duras, siempre me da miedo que te pille una ola y no puedas salir de ahí abajo, o darte contra el fondo en un arrecife de coral. Cosas que ya he vivido antes, conozco la angustia, y entonces les tengo respeto y por supuesto miedo.

¿Qué opinas de la evolución técnica que está viviendo el surfing?

Yo lo veo así: hubo una época que del surfing clásico se pasó al surfing innovador. Pero lo que está claro es que incluso hoy, si haces un surfing innovador pero no sabes el ABC del clásico… tampoco te vale de mucho. A mí me gusta mucho que en el surf se respetan mucho las raíces, y el ABC que te digo es algo que tienes que hacer bien si quieres llegar arriba en el deporte. Si ya tienes el bonus del surf innovador y te haces con el pack completo. Que además creo que es el caso de los que están hoy en día en el top cinco del mundo, y que son los que están llevando el deporte a otro nivel. Mira, estos días en este campeonato en Zarautz, los que han ganado lo han hecho sin hacer ningún aéreo. Surf básico, bien marcado, haciendo los giros donde hay que hacerlos, sin dejar de aprovechar la ola al máximo…

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

Aritz Aranburu: pasión, potencia y estilo

¿Cómo te oxigenas cuando no estás surfeando?

Es verdad que paso mucho tiempo en el mar. Un montón. Pero me encanta la montaña también. Y las poquitas veces que no estoy en el mar me encanta ir al monte. Este año he hecho snowboard un par de veces´… todos los deportes que sean en contacto con la naturaleza me encantan. Y luego hay otros que no practico tanto pero les tengo mucho cariño, por ejemplo el tenis. Me encanta el componente psicológico del deporte, incluso los deportes de lucha me gustan también por ese componente, el boxeo… uno contra uno… muy de gladiadores.

Y en el surf ese componente psicológico es muy importante también…

Puff, yo te diría que en el surf es incluso mucho más importante que en otros deportes. Creo que en todos los deportes lo es, pero en el surf imagínate, cuando a veces por muy preparado que estés a veces te gana alguien que incluso ha salido de fiesta el día anterior pero le tocan dos olas buenas… Y si te pasa tienes que saber darle la vuelta a eso porque te puede frustrar mucho. Tienes que saber qué cosas te puedes echar en cara y cuáles no. Y saber ser constructivo. Psicológicamente, así se hunden muchas carreras: por no entender, frustrarte demasiado…

¿Te ha pasado en algún momento?

La verdad es que es uno de los puntos fuertes de mi carrera. Mucha gente me lo dice, que psicológicamente he sido muy fuerte, y la clave de eso ha sido sentirme agradecido. Soy crítico conmigo mismo, pero no hasta el punto de machacarme y no levantar cabeza. Siempre tengo presente que vivo de lo que más me gusta, y voy a intentar mantenerlo.

FOTOS: Edu Bartolome

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