Memorias del Nanga Parbat

Aquella expedición, que ocupará permanentemente un renglón de honor en las enciclopedias de los Himalayas, contó con todos los ingredientes para una historia memorable. Fraternidad, sudor, corazones vehementes, una larga tradición alpina y cierta controversia. Y esa es precisamente la historia que Alex Txikon va a contarnos en su primer libro. Lo cierto es que cuesta imaginarse a alguien como Alex en los tiempos del confinamiento. Lo visualizaba aterrorizando a sus paredes a golpe de piolet o dejando hechos trizas sus muebles en turbulentas sesiones de aizkolaritza. Sin embargo, el vizcaíno ha volcado toda su energía en el teclado. "No escribía tanto desde que hice el grado superior", bromea Txikon, que reconoce llevar más de dos años de trabajo, llenando cuadernos de su puño y letra envuelto una voragine de emociones y recuerdos. Fue la escaladora murciana Esther Cruz quien le animó a lanzarse a esta nueva aventura, pero ha sido esta crisis global lo que finalmente ha espoleado a Alex. "Quiero aportar algo a la sociedad en estos momentos dífíciles, la cultura y el ocio son importantes y todos tenemos que poner de nuestra parte, así que le estoy dedicando todo mi tiempo y mi cariño". El libro, que repasa aquella sobresaliente ascensión y todo lo que la rodeó antes y después, podría estar disponible para finales de año. "Me voy a dejar la piel. Ojalá en cuanto pase todo esto podamos juntanos en una sala y contar historias bonitas de montaña".

Eso es precisamente el relato que pretende construir Alex, una hermosísima epopeya sobre la voluntad. "Queremos que sea una historia positiva, sin odios". Como suele ocurrir, porque somos humanos y nos va la marcha, aquel pulso bestial no estuvo exento de polémicas, sobre todo en Italia a raíz de la relación entre Simone Moro y Daniele Nardi, quien desaparecería dos inviernos después, junto a Tom Ballard, mientras intentaba el infame Espolón Mummery. Antes de su trágico final, Nardi había participado en la expedición de Txikon y Sadpara, colaborando en equipar las primeras secciones de la montaña. La irrupción para el ataque definitivo de Tamara Lunger y Simone Moro, que estaba a punto de anotarse su cuarto ochomil invernal, precipitó su abandono. Los motivos reales nos los explicará Alex en su libro. "Hay muy buenos libros y un monton de publicaciones, algunas bastante desafortunadas, en las que se cuenta esta escalada histórica, pero creo que faltaba nuestra versión. Somos los que conocemos lo que pasó realmente. Hubo mucha polémica en Italia entre Simone y Daniele, pero en la montaña no hay ganadores, ni perdedores, ni leches en vinagre, hay momentos para compartir y hechos, y esos hechos son los que marcan el devenir de la ascensión. Faltaba nuestra versión y pronto estará disponible para todos", continúa Alex.

El pasado 26 de febrero de 2016, Alex Txikon, Ali Sadpara y Simone Moro hacían historia de la montaña al firmar la primera ascensión invernal del Nanga Parbat, un codiciado tesoro alpino que había requerido de tres décadas de intentos para rendir sus secretos al empuje humano. Este es el vídeo de aquella obra magna del deporte y el espíritu en los gigantes de la Tierra.

Vídeo: Aitor Bárez - Avista Multimedia

Cualquiera que se haya puesto frente a una página en blanco conoce el reto mayúsculo al que se está enfrentando Alex. "Se me está haciendo largo, difícil, pero estoy disfrutando muchísmo". Revivir aquel impulso descomunal, que ahora mora entre lo fugaz y lo eterno, es un desafío a la altura de esa montaña fabulosa. "Todas esas vivencias, sentimientos... cuesta bastante escribirlo. Trasladarse a esos moentos no es sencillo, pero siento una gran felicidad cuando pienso en ello", sigue el alpinista, y apunta. "Aunque no te engaño si te digo que no es una felicidad diferente a la que siento recordando otras montañas u otras épocas como la que pasé escalando con Edurne Pasabán. Eso me ha llamado la atención. Lo recuerdo todo con igual cariño y con una ilusión del copón... como siempre".

Faltaría más, gran parte del protagonismo de la historia correrá a cargo de Ali Sadpara, compañero con el que comenzó y culminó aquella extraordinaria correría invernal. Eso también dará pie a importantes reflexiones sobre el ague del alpinismo local en los ochomiles. "Me encanta que para Ali aquel principio sea también un futuro. Como paquistaní está siendo un pionero en las montañas y en la forma de encontrar la fórmula para profesionalizarse y escalar con subvenciones de su gobierno. Para buscarse la vida, como ahora que pretende escalar los 14 ochomiles. Ocurre como con los nepalíes, que se lo están currando para ser populares y lanzar sus agencias o marcarse sus propias grandes aventuras". Alex, un tipo siempre comprometido y agradecido, es uno de los que más luchan por cambiar el tratamiento de estos alpinistas en los medios, alejándolos de su tradicional (y muchas veces incorrecto) papel de porteadores.

Será que un servidor es medio millenial pero la única expresión que se me ha instalado en la cabeza es "¡hype por las nubes!". Llaménlo expectación si lo prefieren, pero esas páginas futuras serán parte de las grandes historias del alpinismo.

Antes de cerrar la conversación telefónica, Alex ha querido lanzar un llamamiento a nuestros lectores, animándolos a enviarnos sugerencias sobre lo que os gustaría que apareciera en el libro o su formato, y da la bienvenida a cualquier idea que queráis enviarle, así como a preguntas y dudas que os surjan y que responderá en cuanto sus yemas dejen de echar humo. Podéis enviarnos vuestras sugerencias y preguntas a través de nuestras redes sociales o enviando un e-mal a oxigeno@mpib.es.