Ha llegado la hora de la verdad en el Nanga Parbat. Las nevadas y ventiscas que azotaban el Karakorum ofrecerán una tregua durante las próximas horas y los equipos presentes en la "Montaña Desnuda" unirán fuerzas de cara a un ataque a cima que podría producirse durante la próxima madrugada.
En el resto de montañas, K2, Broad Peak y Gasherbrums se continuará equipando la montaña y llevando a cabo las rotaciones de aclimatación, pero los asaltos definitivos están previstos para finales de este mes de julio.
¡Alpinistas, reuníos!
Varias son las expediciones en el Nanga Parbat que compartirán sus esfuerzos para las próximas 48 horas. Sergi Mingote establecía ayer el C3 a 6.700 metros y su intención era progresar hoy hasta fijar el Campo 4, todavía inédito esta temporada. El catalán perdía la compañía de Mattia Conte, que por seguridad y falta de aclimatación decidía no ascender, y de su sherpa Ali Roze, aquejado de un principio de edema cerebral que le obligaba a regresar a casa. Lo mismo le sucedía al sorprendente brasileño Moeses Fiamoncini, cuyo porteador Hasan se rompía una mano durante el descenso del muro Kinshofer. Así, Moeses y Mingote formarán cordada, como ya hacían con éxito en el Lhotse esta primavera. "Eso nos obliga a replantear todo. Portearemos una tienda más ligera y el equipo justo para intentar un ataque a cumbre muy ligero", explicaba Sergi Mingote (seguir en vivo) antes de partir del Campo Base. "Sería para mí increible que una montaña como esta fuera mi quinto ochomil del proyecto 3x2x8000, despues del Broad Peak, el K2, el Manaslu y el Lhotse". Mingote podría sumar su quinto ochomil, sin oxígeno, en menos de un año. "Ahora, más que nunca, toca soñar a lo grande".
Mingote y Fiamoncini no estarán solos en los bastiones superiores de la montaña, donde por encima de los 7.000 metros deberán abrir huella y bregar con una meterología voluble. Junto a ellos avanzarán Ali Sadpara y Stefi Troguet (seguir en directo). La andorrana, que algunos han llegado a definir como "instagramer de altura", está superando todas las expectativas. No sólo está escalando de forma sobresaliente, siendo capaz de mantener su pintalabios rojo en perfecto estado ("chasing summits with red lipstick" se define en sus redes sociales) , también ofrece un caracter alegre y afable incluso bajo la tormenta. Con 26 años y en su primer ochomil, asciende sin usar oxígeno suplementario y es capaz de seguirle el ritmo a Sadpara, nada menos. Stefi podría convertirse en las próximas horas en la segunda andorrana de la historia que holla un ochomil. La primera fue Nani Duró, con el Cho Oyu, en 1997.
La cantidada de nieve acumulada en el Nanga y la meteo caprichosa tendrán la última palabra, aunque el alpinista y meteorólogo Cala Cimenti confirma lo prometedor de las próximas jornadas, con tiempo estable entre hoy y el día 4 de julio. Cimenti también forma parte de la coalición de alpinistas, junto a sus compañeros rusos Vitaly Lazo y Anton Pugovkin, con quien comparte la ambición de firmar el primer descenso íntegro con esquís del Nanga Parbat. Es decir, tienen el mismo objetivo que los franceses Tiphaine Duperier y Boris Langenstein, que ascienden por su cuenta, detalle que ha causado cierta controversia entre el resto de expediciones. Se les acusa de no querer jugar en equipo, excepto para aprovechar el trabajo realizado por los demás al equipar la vertiente Diamir.
