Un día complicado en el Nanga Parbat

Una crónica de Sergi Mingote desde las laderas de la "Montaña Desnuda"

Sergi Mingote

Un día complicado en el Nanga Parbat
Un día complicado en el Nanga Parbat

Sergi Mingote y Ali Sadpara continúan bregando con la aclimatación en las laderas del Nanga Parbat (8.125). Sergi necesita coronar el Nanga y después los Gasherbrum I y II para hacerse con el récord de ascender seis ochomiles sin oxígeno en el margen de un año, por lo que los plazos son clave para su objetivo. Por el momento han alcanzado el C2, aunque se han encontrado con dificultades, como no podía ser de otra manera, en el muro Kinshofer. Esta es la crónica que ha compartido el catalán.

Podéis seguir las andanzas de Sergi Mingote en vivo a través de su racetracker.

DIA COMPLICADO EN EL MURO KINSHOFER

Después de varios días con nieve, ayer decidimos salir hacia Campo 2. Fue un día duro y arriesgado, pero lo mas importante es que trabajando como un verdadero equipo las tres expediciones que ascendíamos desde el CB al C2 conseguimos salvarlo bastante bien.

El origen de todo parte en los más de 1.800 metros que nos “metimos" entre pecho y espalda abriendo huella en todo momento. Sobretodo los dos sherpas de Seven Summit y yo ayudando en lo posible. El muro Kinshofer, una pared de piedra de algo mas de 100 metros nos puso a todos a prueba, entre viento y nieve (no hay día que nos de tregua).

A las 18 h llegábamos al C2, tras mas de 13 horas de “tute", Galzen sherpa y Thendi sherpa junto a Steffi Troguet, la joven andorrana que apunta buenas maneras, y yo. El tiempo se cerró de nuevo y tuve que optar por montar una tienda, a duras penas, que habían dejado los rusos en un depósito del C2. Esa decisión finalmente salvó a Ali Roze de problemas muy graves.

A las 21.30 h de la noche llegaba al C2, sin su mochila, totalmente deshidratado y con claros síntomas de hipotermia. Lo metí a la tienda y poco a poco pudo rehacerse. Fue una situación extrema. Una hora más tarde llegaron Moeses, el alpinista brasileño y su porteador Hesan.

Ya empieza a ser demasiado habitual encontrarme con movidas delicadas en altura, y si os he de ser sincero no me gusta nada. Momentos complejos como estos nos hacen crecer como alpinistas y como personas. Actuamos como un equipo y eso nos hizo mejores, nos hizo más fuertes.

Hoy estamos muy fatigados y no creo que alcancemos C3, pero haremos una punta de aclimatación hasta los 6.500 metros aproximadamente. Mi compañero Mattia estaba ascendiendo hoy hasta el C2, pero ha decidido volver a C1 de nuevo porque ha caído una avalancha y no ve segura la ruta.

Nuestra intención es volver a pasar la noche en C2, a unos 6.050 m de altura, en una preciosa arista que nos aguanta en un perfecto equilibrio.

Tengo unas imágenes y unas fotos que seguro os encantaran pero esta vez no ha sido posible llevarme el Thuraya para enviar imágenes y no será posible. Cuando baje del Nanga os prometo un buen resumen. Esta montaña no nos lo esta poniendo fácil, pero ¿alguien dijo que lo seria?

¡SOÑAD A LO GRANDE amig@s!