Un gran viaje por los cielos del Montsec

Del parapente al astroturismo, una experiencia sideral por los amables horizontes del Espacio Natural Protegido de la Sierra del Montsec

Rinde tributo a uno de los mejores cielos de Europa en el  Parque Astronómico del Montsec. Foto: Oriol Clavera / @ArxiuAraLleida
Rinde tributo a uno de los mejores cielos de Europa en el Parque Astronómico del Montsec. Foto: Oriol Clavera / @ArxiuAraLleida

La gran diversidad de elementos y contrastes del Espacio Natural Protegido de la Sierra del Montsec, en Cataluña, le confieren un carácter aventurero y a la vez acogedor, que cautiva al visitante y lo transporta a un mundo de sensaciones y experiencias que no lo dejan indiferente: montañas, valles, ríos, pantanos, desfiladeros, bosques y tierras de secano; todo lo que el viento y el agua esculpieron en el pasado hoy se nos presenta como una puerta abierta al disfrute de volar, navegar o pasear. Pero además del disfrute terrenal, este escenario, gran puerta al Pirineo, también nos permite un viaje excepcional por sus cielos, ya sea a golpe de vela o cobijados bajo el telescopio, disfrutando de un firmamento al que no le falta la etiqueta de Destino Starlight.

Un espacio para todos

Paisajes de gran belleza y profundos contrastes, entre los que destacan desfiladeros de impresión. Su límite occidental, que a su vez marca la frontera con Aragón, es el río Noguera Ribagorzana, que forma el desfiladero de Mont-rebei. Este paraje, con paredes en caída vertical de quinientos metros sobre el río, es uno de los puntos con mayor valor paisajístico del espacio. Toda la zona es muy apreciada por los amantes de los deportes de montaña y de aventura, pues en sus ríos, desfiladeros y pantanos se puede practicar desde remo en canoa o kayak hasta escalada, espeleología o vuelo en parapente. Asimismo, sus caminos invitan a senderistas y amantes de BTT a descubrir árboles monumentales, ermitas y yacimientos paleontológicos. El de la Pedrera de Rúbies, del jurásico superior, es uno de los más importantes de Catalunya, por ejemplo. El Montsec tiene una proporción ideal de naturaleza, aventura, cultura, ciencia y gastronomía.   

El Montsec invita a practicar senderismo por el espectacular desfiladero de Mont-rebei, el desfiladero de Mu, las rutas señalizadas en el valle de Àger, en Vilanova de Meià, en las Avellanas y Santa Liña, en Camarasa... Las paredes verticales del Montsec son lugares conocidos y únicos para la escalada, como Sant Llorenç de Montgai, el desfiladero de Terradets, Vilanova de Meià, Santa Liña, Àger, Os de Balaguer, Camarasa, Cubells, Alòs de Balaguer, etc. También se practica la espeleología en cuevas como el Forat de l’Or de Llimiana, la Cova dels Muricecs en Cellers, la Cova del Tabac en Camarasa y la Cova Negra en Os de Balaguer.

Todas las prácticas en la comarca, así como las agencias implicadas y los imprescindibles guías, invitan a una actividad respetuosa con el medio ambiente, muy enfocada a la sostenibilidad de su oferta y la continúa educación por los valores ambientales del lugar. Por eso, y como solemos repetir, la contratación de un guía local siempre es una decisión acertada, tanto por seguridad como por nutrirnos de un conocimiento que lleva impregnado en esta tierra durante generaciones.

​Los pantanos de Camarasa, Canelles, Cellers, Sant Llorenç de Montgai, Santa Ana y Rialb configuran el espacio de aguas tranquilas más grande de toda Cataluña. En ellos puede practicarse piragüismo, surf de vela, agua bus, hacer paseos en lancha de motor, etc. En el río Segre, donde las aguas son más bravas, puede practicarse rafting y minirafting. En el río Rialb, puede hacerse barranquismo. ​Entre el verde del paisaje boscoso y el azul de las láminas de agua encontramos espacios con una flora y fauna ricas y variadas, como las de la reserva natural de Sant Llorenç de Montgai y la confluencia del Segre con la Noguera Pallaresa.

Para los que busquen espacios más destinados al wellness, incluso combinándolo con la práctica del golf, encontrarán una amplia oferta de alojamientos y propuestas para una experiencia más reposada en un marco de igual encanto natural.

Una muestra de lo que ofrecen los cielos sobre el Parque Astronómico del Montsec Foto Oriol Clavera @ArxiuAraLleida
Una muestra de lo que ofrecen los cielos sobre el Parque Astronómico del Montsec. Foto: Oriol Clavera / @ArxiuAraLleida
Reserva Starlight

Las condiciones naturales del Montsec le permiten a uno cobijarse bajo el mejor cielo de Cataluña y uno de los mejores del mundo: baja pluviometría, alto porcentaje de noches serenas, buena estabilidad de las imágenes y, sobre todo, la constatación de la baja contaminación lumínica. La decisión de construir aquí el Parc Astronòmic Montsec (PAM) se fundamenta en estas características.

Desde antes de los años 90, esta zona ha sido utilizada por colectivos de aficionados a la astronomía como lugar de referencia para realizar sus observaciones. A mediados de los años 90, fruto de la voluntad de miembros de este colectivo con el apoyo del investigador Dr. Joan Oró, pusieron en marcha el proyecto del Parc Astronòmic Montsec. Para poder aprovechar al máximo una instalación astronómica, es necesario que se cumplan unas condiciones del entorno en cuanto a estabilidad de la imagen, condiciones meteorológicas y baja contaminación lumínica. Varios estudios realizados por instituciones científicas catalanas mostraron que la baja pluviometría, un porcentaje elevado de noches despejadas, una buena estabilidad de las imágenes y, sobretodo, la constatación de su baja contaminación lumínica, lo acreditan como el mejor cielo de Catalunya y uno de los mejores del mundo. El territorio del Montsec ha sido reconocido y certificado como Destino Turístico y Reserva Starlight por el Programa M&B de la UNESCO. Esta distinción lo acredita como uno de los mejores cielos del mundo para la observación astronómica y para la realización de actividades turísticas basadas en este recurso.

Las mediciones de contaminación lumínica realizadas en la última década han mostrado que una gran parte de la zona del Montsec presenta unas condiciones excepcionales de oscuridad y, el hecho de que las afectaciones de los municipios integrantes de la zona sean muy bajas, garantiza la calidad y la preservación de este cielo nocturno.

Actualmente se ofrecen diversos paquetes turísticos que podéis curiosear en experience.catalunya.com, que incluyen fabulosos y solitarios alojamientos rurales, experiencias agroturístivas, visitas guiadas por museos locales y castillos ancestrales, y por supuesto una experiencia en el Centro de Observación del Universo (COU), una instalación multimedia excepcional en Europa que consiste en un cúpula desplegable donde se pueden proyectar documentales o películas en formato “cúpula completa”, y observar el cielo a través de las imágenes que obtiene un telescopio de 30 cm. de diámetro instalado en la misma sala. Además podrá visitar el parque de los telescopios para realizar observaciones directas y disfrutar de la exposición permanente.

Parapente en la Vall d'Àger Foto Oriol Clavera
Parapente en la Vall d'Àger. Foto: Oriol Clavera / @ArxiuAraLleida
Elevarnos con las estrellas

Para aquellos a los que observar el firmamento desde tierra no sea suficiente, deben saber que el Montsec también cuenta con uno de los cielos más cotizados para la práctica del parapente. Cabe destacar que esta puerta a los Pirineos y las tierras de Lleida lideran la oferta de empresas deportivas outdoor, ofreciendo un sinfín de actividades para disfrutar de esta naturaleza desbordante.  Sólo tenéis que buscar el territorio y la modalidad deportiva que más se ajusta a vuestra experiencia de ocio: aventura blanca, aventura extrema, cicloturismo, deportes de agua, deportes de aire, golf, hípica, marcha nórdica, pesca, senderismo... Pero sin duda una de las más gratificantes experiencias la obtendréis deslizándoos bajo las nubes del territorio ilerdense.

Los valles de Àger y de Meià están reconocidos como unas de las mejores zonas de vuelo libre de todo el mundo. Durante el año, el valle de Àger acoge campeonatos del mundo, de Cataluña y de España de parapente y ala delta. En el Montsec, los amantes del vuelo libre pueden practicar parapente, ala delta, vuelos en globo y ultraligero y también vuelos con paramotor y paratrike. Pegarse un vuelo biplaza en estos cielos es, sin duda, una de las actividades más refrescantes que uno puede practicar, sin necesidad de experiencia previa, lo que supone que cualquiera puede explorar esta tierra desde el aire. Una oportunidad única de probar nuevas emociones y saborear toda la paz de un deporte considerado extremo pero que sin embargo está abierto a todos los públicos y cuyas sensaciones se alejan mucho de los golpes de adrenalina. Pura tranquilidad masiva.

Estas geografías únicas ofrecen unas condiciones meteorológicas óptimas para la generación de corrientes térmicas y dinámicas durante todo el año, por lo que se ha convertido en un destino de referencia internacional.

Decálogo del buen ecoturista

El Espacio Natural de la Sierra del Montsec es un entorno protegido y como tal nuestro objetivo, además de disfrutar de kilómetros a lo largo de sus espectaculares senderos, es preservarlo a través de lo que llamamos un turismo “consciente”. Aquí os dejamos un valioso decálogo, que todos deberíamos tener muy presente antes de afrontar nuestras actividades en entornos únicos como este, ¡apunta!

1. Conoce bien el medio natural. Infórmate antes sobre los atractivos naturales, las restricciones, los itinerarios...

2. Equípate bien. Lleva buen calzado, ropa cómoda y colores discretos. Unos prismáticos, un mapa, un GPS y una guía de campo te serán muy útiles.

3. Ve bien acompañado. Un buen guía te ayudará a disfrutar de una experiencia segura e inolvidable.

4. Sé respetuoso. El silencio es un gran aliado. Respeta las regulaciones del espacio natural, no molestes a la fauna ni te lleves flores o rocas.

5. Consume productos locales. Busca productos de proximidad (alimentos o artesanía).

6. Escoge empresas certificadas. Contrata alojamientos con el Distintivo de Calidad Ambiental o certificados con la Carta Europea de Turismo Sostenible.

7. Muévete sin dejar huella. Siempre que puedas, opta por el transporte público o compartido.

8. Entra en los centros de visitantes. Muchos espacios naturales protegidos disponen de centros de visitantes que te informarán sobre actividades, guías e itinerarios.

9. Llévate los desechos. Llévate todos los desechos e infórmate sobre entidades sin ánimo de lucro que ayudan a conservar el espacio natural que has visitado.

10. Ayuda a conservar. Pregunta a los guías o en los centros de visitantes sobre proyectos o entidades no lucrativas.