De las múltiples maneras que tenéis de conocer un territorio tan extraordinario como la Costa Brava y el Pirineo de Girona, caminar es una de las más satisfactorias. Y con la tendencia que tenemos hoy en día para hacerlo todo rápido y fácil, salir a andar toma al mismo tiempo un valor incalculable, ya que nos da la posibilidad de disfrutar pausadamente de los matices de un paisaje cambiante, que va desde la misma línea de la costa hasta los abruptas cimas de casi 3.000 metros del Pirineo. Senderismo de mar y montaña, en todas las cotas y para todos los niveles, para disfrutar todo el año de una gran diversidad de paisajes y de un territorio de gran tradición excursionista.
Y también es el territorio deseado para los corredores de montaña, que valoran la especial orografía de la Costa Brava, así como la contundencia y el desnivel pirenaico. Juntos confieren también unos escenarios idóneos para la práctica del running, en un entorno desafiante que convierte el esfuerzo y los pasos recorridos en kilómetros de satisfacción y mucha calidad deportiva.
Caminar es vida, es comunión con el paisaje y vínculos con la gente del territorio, con el entorno natural que nos regala caminos y senderos para todos los gustos, para todas las edades y estados de forma. Tenemos al alcance paseos de pocos minutos y tenemos largas travesías de montaña, revirados caminos de ronda que recorren la Costa Brava y antiguos trazados montañosos que unen cordilleras y grandes cimas. Todas las propuestas de senderismo se pueden hacer por libre o con el acompañamiento de guías profesionales de las empresas especializadas que operan en el territorio. No sólo os aportarán seguridad en rutas de alta montaña, sino que también os ayudarán a profundizar en conocimientos en la interpretación de la naturaleza y saborear experiencias únicas, con propuestas para todos los niveles y grupos de edad, y con todos los servicios para que sólo tengáis que preocuparos de disfrutar de la salida. Los propios profesionales os pueden asesorar sobre las diversas fórmulas de senderismo interpretativo con guías de naturaleza que tenéis a vuestro alcance.
Senderos de gran recorrido
Los encontraréis bajo la denominación GR, que se refiere a los senderos de gran recorrido. Son el paradigma del mar y montaña, del Pirineo más Mediterráneo y a menudo son fruto de la recuperación de antiguas vías de paso y que forman una extensa red de caminos extendida por toda Europa. Están bien señalizados y son un modelo de sostenibilidad idóneo para descubrir un patrimonio milenario y revivir el espíritu de los grandes expedicionarios que forjaron las antiguas leyendas del Pirineo de Girona. Los encontraréis todos descritos y con sus fichas técnicas.
- El GR 92, de dificultad baja-media, recorre todo el litoral gerundense con panorámicas extraordinarias sobre las calas y pueblos de la Costa Brava y el Mediterráneo. Cruza lugares de gran interés natural como el Parque Natural del Cap de Creus, el Parque Natural de los Aiguamolls del Empordà o el Parque Natural del Montgrí, Illes Medes y Baix Ter. Su tramo gerundense se puede recorrer íntegramente en una decena de etapas, pero también se puede realizar parcialmente desde cualquiera de los municipios por los que pasa.
- El GR 11 es el sendero de los Pirineos, y cruza esta cordillera de punta a punta, desde el Atlántico al Mediterráneo o viceversa por su vertiente sur, bordeando la frontera con Francia. A menudo pasa a cierta altitud, pero deja el asalto a las cumbres a la voluntad del caminante. Se transita por un paisaje de una diversidad excepcional: parajes alpinos a más de 2.000 m de altura, como Vall de Nuria o el Parque Natural de las Capçaleres del Ter i del Freser; zonas abruptas de valles profundos cubiertas de encinares y robledales en la Alta Garrotxa; espacios de transición, como el Paraje Natural de Interés Nacional de la Albera, y el Parque Natural del Cap de Creus, donde los Pirineos se funden con el mar. El tramo que discurre por Girona se puede recurrir íntegramente en una docena de etapas que suman unos 250 kilómetros, o bien parcialmente desde cualquier punto de acceso.

- El GR4. Procedente de un GR europeo, este sendero se inicia en el puente internacional de Puigcerdà y transcurre en dirección sur hasta Montserrat. El sector gerundense se concentra íntegramente en la Cerdanya, que cruza de norte a sur, primero por la llanura ceretana hasta Alp y subiendo después hacia la estación de esquí de la Molina y hacia Coll de Pal, desde donde se disfruta de grandes vistas de los Pirineos.
- El GR 178 o Ruta de Serrallonga, de poco más de 50 kilómetros, sigue los pasos del famoso bandolero del s. XVII por el macizo de las Guilleries y el Collsacabra. El sendero nace en Santa Coloma de Farners y acaba en el pantano de Sau, con una variante que os llevará hasta el puerto de la Creu d’en Serrallonga, para acabar en Sant Hilari Sacalm.
- El GR 1, conocido como Sendero Histórico o Transversal, nace en el enclave arqueológico de Empúries, en la Costa Brava, y finaliza su tramo gerundense en el Ripollès. Transcurre paralelo al GR 11 pero por la zona prepirenaica.
- El GR 2 nace en La Jonquera, en la frontera francesa, y sin desniveles excesivos se dirige hacia el suroeste mientras cruza municipios de gran interés como Besalú o Santa Pau. En este punto se adentra en el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa. Atraviesa la Vall d'en Bas y sigue por el macizo del Collsacabra hasta el Parque Natural del Montseny.
- El GR 83, conocido como el Camino del Norte, es un trayecto cargado de simbolismo ya que es el trazado que siguieron miles de exiliados de la guerra civil española a principios del 1939, huyendo hacia Francia. Podéis comenzar en Arbúcies, en el Parque Natural del Montseny, para dirigiros hacia el norte cruzando el macizo de las Guilleries y el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, desde donde se adentra en los Pirineos hacia Beget, el Ripollès, y finalmente entra a Francia.
Rutas temáticas para una desconexión activa
Una buena desconexión es necesaria para cargar pilas, reencontrarse consigo mismo y empezar de nuevo con más fuerza. Una buena forma de mantenerse activo disfrutando de las virtudes de una vida saludable y caminatas en buena compañía es conocer el gran abanico de rutas de proximidad que ofrece el territorio. Las encontraréis lineales y circulares, más largas y cortas para que todo el mundo se las adapte en función de su motivación y ganas de caminar. Eso sí, lo que todas ellas comparten es la garantía que os sumergiréis en un sentimiento de bienestar y que experimentaréis en primera persona las bondades del cromatismo mediterráneo y del Pirineo, caracterizados todo el año por unos colores espectaculares y unos cambios de luz fascinantes, y con una gastronomía excepcional. Porque puestos a elegir mar o montaña, ¿por qué no elegís los dos y vivís el doble?
- El legado histórico de las Vías Verdes. Las Vías Verdes son unos atractivos caminos de tierra compactada, creados generalmente sobre antiguos tramos ferroviarios en desuso. En la Costa Brava y el Pirineo de Girona hay 125 kilómetros de vía verde divididos en cuatro rutas, que permiten ir del Pirineo hasta el mar caminando, de manera fácil, agradable y segura, cruzando municipios y espacios naturales con legados de antiguas civilizaciones y una gran carga histórica. Se pueden hacer múltiples interpretaciones, para adaptarse al tiempo del que disponéis y a las ganas que tengáis de caminar.
- La ruta transfronteriza Pirinexus. La ruta Pirinexus aprovecha los 125 kilómetros de vías verdes, y les suma 226 más para completar una ruta circular de 351 kilómetros que recorre la práctica totalidad de las comarcas de Girona y las une con Francia. Forma un itinerario transfronterizo circular que une zonas naturales muy diversas: las pirenaicas, las de interior y las de litoral, con el descubrimiento de pueblos y villas de pescadores de la Costa Brava.

- Los caminos históricos de Itinerànnia. Con más de 2.500 kilómetros señalizados, la red de senderos Itinerànnia ha recuperado los caminos históricos de las comarcas del Ripollès, la Garrotxa y el Alt Empordà, enlaza todos los pueblos de los Pirineos con el Mediterráneo y viceversa, y pone en valor sus activos naturales y culturales. Como siempre, podéis organizar las rutas a vuestra conveniencia, escogiendo los itinerarios, los lugares de paso, el número de etapas...
- La red de Senderos del Baix Empordà. En el centro de la Costa Brava, la comarca del Baix Empordà ofrece una red de senderos que forma un entramado de 370 kilómetros ideales para la práctica del senderismo. Obviamente no será necesario completarlos todos, pero debéis saber que la red de caminos os permitirá conocer el territorio de norte a sur y de este a oeste, y en poco tiempo podéis pasar de las calas más solitarias a los bosques más encantadores, o de las principales villas a las aldeas más inhóspitas y tranquilas.
- El Camino de Santiago. El tramo gerundense del Camino de Santiago tiene un doble origen: el recorrido que viene del puerto de Panissars, en La Jonquera, y que da continuidad al camino francés; y el recorrido desde el Port de la Selva, entrando por el Mediterráneo, con el monasterio de Sant Pere de Rodes como punto importante de peregrinación y visita. Ambos se unen en Figueres en un solo camino que sigue hacia Girona y la Vall d'en Bas, entre otros puntos, y cruza toda Catalunya como arteria principal de los múltiples caminos históricos de peregrinación a Santiago de Compostela desde nuestras tierras.
- Ruta del Ter. Este itinerario sigue el curso del río Ter desde su nacimiento en Ulldeter, en los Pirineos, a más de 2.200 m de altura, hasta que llega al mar en Torroella de Montgrí-L'Estartit, en plena Costa Brava cruza buena parte de las comarcas gerundenses recorriendo una gran diversidad de paisajes: desde el curso alto del Ter, pasando por sus meandros en las llanuras del Empordà, hasta que llega al mar. A lo largo de la ruta el senderista puede observar elementos culturales, históricos y tradicionales de los municipios por donde pasa este río, el más caudaloso de la demarcación, y que ha sido durante siglos un motor imprescindible para la industria y la agricultura de muchos pueblos.
- Los Grandes Caminos del Agua, en La Selva, son un conjunto de itinerarios bien señalizados, que os permitirán descubrir la riqueza natural que esconde la comarca.
La pureza de las travesías por etapas
El Pirineo de Girona es la cuna del excursionismo catalán, y en sus ancestrales senderos se han escrito auténticas proezas montañosas. La popularización del senderismo ha hecho que algunas de las antiguas rutas pirenaicas, frecuentadas por ganaderos y comerciantes, se hayan convertido en atractivos itinerarios que se recorren en varios días, habitualmente haciendo noche en refugios o en alojamientos de los pequeños pueblos por los que discurren, y con más de 25 cumbres de 2.500 metros que os esperan. La convivencia con vuestros compañeros de ruta y con otros que conoceréis por el camino hacen de estas estancias auténticos recuerdos. Ver caer la silenciosa noche sobre las montañas desde el calor de un refugio es una experiencia que hay que vivir en primera persona alguna vez en la vida.

- Serra de Monestirs (65 km). Serra de Monestirs es una travesía que permite descubrir el patrimonio natural, histórico y cultural del Ripollès. Con inicio y final en Ripoll, y con el Taga (2.040 m) como cima culminante, transcurre por Serra Cavallera. Las visitas opcionales a los monasterios de Santa María de Ripoll y Sant Joan de les Abadesses, y los menús elaborados con productos locales, convierten la travesía en una magnífica experiencia.
- Refugios del Torb (73 km). Para hacer esta travesía circular de alta montaña, que recorre los espacios más emblemáticos del Pirineo de Girona y del Pirineo francés más oriental, se recomienda organizarla en cinco etapas. La ruta une el Puigmal (2.910 m) o el valle de Nuria con el Canigó (2.784 m) o el valle de Merialles, con un paisaje que permite disfrutar intensamente del entorno trepando por carenas, recorriendo valles y coronando cimas de gran tradición excursionista como el circo de Ulldeter, el valle de Núria, el valle de Coma de Vaca, los lagos de Carançà o el pueblo de Mentet.
- Bastions (105 km). Bastions es una travesía de montaña exigente que, con inicio y final en Ribes de Freser, une varios pueblos del Valle de Ribes con los picos más altos y emblemáticos del mismo valle y del Pirineo de Girona, como el Puigmal (2.910 m), el Bastiments (2.883 m), el Balandrau (2.585 m) o el Taga (2.038 m), sin olvidar el paso por Vall de Núria. Se recomienda hacerla en cinco etapas, algunas de las cuales, de alta montaña aunque se puede hacer en menos días en función de la forma física.
- Los Tres Refugios (52 km). La de los Tres Refugios es una ruta circular de alta montaña que enlaza los valles del Freser, Bacivers, Carança Coma de Vaca, mayoritariamente en el Pirineo de Girona, con una parte en territorio francés. Une los tres refugios que constituyen la ruta: Coma de Vaca, Ulldeter y Ras de Carançà, y se recomienda seguir el itinerario en este mismo orden, con inicio y final en el pueblo de Queralbs. Los excursionistas más preparados pueden incluir la travesía cimas como Bastiments, el Gra de Fajol o el Balandrau, entre otros.
- Ruta de los Estanys Amagats (73 km). Este itinerario circular de alta montaña recorre los macizos de la Tossa Plana de Lles y del Puigpedrós, los valles de Meranges, de la Llosa y de Aransa, y el Valle del Madriu, en Andorra. A lo largo de las cinco etapas con la que se recomienda hacer el recorrido se descubren, además de la rica biodiversidad de los diferentes parajes alpinos que abraza la travesía, los casi 40 lagos de origen glaciar que dan nombre a la ruta. El alojamiento se hace siempre en refugios de montaña.
- Collioure-Cadaqués (72 km). Es una de las rutas más incluidas en los catálogos de senderismo de toda Europa, por la belleza de su paisaje y por la relativa facilidad del recorrido. Es una salida de varias etapas con un paisaje de viñedos siempre presente, de inspiración artística y caracterizada por una luz especial que adquiere el Mediterráneo en este tramo fronterizo. Es una ruta llena de matices culturales y con un puñado de pueblos históricos que iréis encontrando a lo largo de pequeñas calas y acantilados.

- Marcha del Parque (35 km). La Marcha de las Capçaleres del Ter i el Freser es una travesía de dos días, organizada con el Parque Natural de les Capçaleres del Ter i del Freser y los 4 refugios por donde pasa la ruta (Corral Blanc, Coma de Vaca, Ulldeter y Els Estudis). La salida cuenta con guías de naturaleza especializados que van explicando los diferentes parajes por donde transcurre el recorrido, y guías de montaña que garantizan la seguridad del grupo en todo momento.
Correr hasta el infinito entre el mar y la montaña
Cuando corredores de todo el mundo dicen que aquí entrenarían todo el año, será por algo. Y si algunos de ellos pasan largas temporadas en el Pirineo de Girona y la Costa Brava para preparar la temporada de carreras de montaña, es que realmente el escenario natural es convincente. Y es que aquí encontraréis el entorno perfecto para el running, con una abrupta cordillera pirenaica con un clima suave gracias a la proximidad del mar.
Parajes magníficos de mar y de montaña cargados de identidad y autenticidad, donde se puede viajar al pasado gracias al legado del arte románico y las tradiciones que nos recuerdan los orígenes de unas tierras muy ricas, pero también modernidad en estado puro, que se combinan para hacer de este lugar el espacio ideal para los corredores de montaña.Tanto la Costa Brava como el Pirineo de Girona son muy apreciados por entrenar y disfrutar del trail running. Y la clave es el escenario: un paisaje hermoso, salvaje, y a veces desafiante que convierte el total de pasos recorridos en kilómetros de calidad.

- Correr por la Costa Brava. Las pistas y senderos por el litoral de la Costa Brava son sencillamente un escenario espectacular. Recorreréis kilómetros y kilómetros con vistas a calas de color azul turquesa, saboreando el contraste entre las rocas cubiertas por abundante vegetación con el Mediterráneo como constante telón de fondo. Aunque estemos a pocos metros sobre el nivel del mar, los cambios de desnivel son constantes y el entrenamiento completo está garantizado.
- Correr por media montaña. El entorno de Girona y Banyoles es ideal para entrenar corriendo. Muy cerca de los núcleos urbanos encontraréis un terreno de media montaña con pistas y senderos frondosos, que recorren pequeños cerros con constantes cambios de desnivel, ideales para entrenar intervalos.
- Correr por alta montaña en el Pirineo de Girona. Cuando la nieve se derrite en los Pirineos de Girona, las cumbres de alta montaña del Ripollès y la Cerdanya son algunos de los paraísos que frecuentan los corredores de montaña. Podréis elegir entrenar por rutas que culminan en ascensiones alpinas para acariciar el cielo a casi 3.000 metros de altura, o bien rutinas de entrenamiento junto al mar o en valles más amables como el de la Cerdanya, el valle de Camprodon o el valle de Núria. El Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, con cerca de 40 volcanes cubiertos de vegetación y la impresionante Fageda d’en Jordà es también una opción singular.
La fórmula perfecta para el mejor rendimiento
La Costa Brava y el Pirineo de Girona tienen la fórmula para la mejora del rendimiento deportivo: entrenar bien y recuperar mejor. Para garantizarlo cuentan con instalaciones deportivas de última generación y un entorno natural con orografía y condiciones climatológicas perfectas para completar la preparación física y practicar deporte al aire libre. Y para rendir al máximo, es necesario que la recuperación sea óptima. Alojamiento, agencias receptivas y empresas de servicios especializados que cuentan con servicios específicos para favorecer la asimilación de los entrenamientos, y clubes y estaciones de Trail Running que dinamizan el sector y os aportarán conocimiento y salidas colectivas como el Club Trail Running Girona, el Centre Trail Palamós o Domini d’Isards, entre otros.
Carreras de montaña para todos los niveles
El Pirineo y los 220 kilómetros de Costa Brava son un territorio de gran tradición excursionista y montañera, cuna de atletas de montaña de reconocido prestigio internacional, como Kilian Jornet, Marc Pinsach, Oriol y Nil Cardona, Tina y Toti Bes, Mónica Fàbrega, Jordi Gamito, Jonathan Romeo, Arnau Julià y algunas grandes atletas extranjeras que han hecho de este su territorio de entrenamiento, como Caitlin Fielder o Jess Andrews. Las carreras de montaña se han convertido en una modalidad deportiva con gran crecimiento durante los últimos años. Para los amantes de este deporte, la Costa Brava y el Pirineo de Girona son el marco de multitud de pruebas, algunas de las cuales tienen renombre internacional, como la Trail del Cap de Creus, la Trail d’Ulldeter, la Olla de Núria, la Trail Costa Brava, la Cursa de Muntanya de Girona, la Trail Rocacorba, la Lloret Trail, la Costa Brava Stage Run, la Pyrenees Stage Run, el Marató Vías Verdes o la Molló Trail, entre otras. También es el territorio que Oxfam Intermon ha escogido para organizar una de las carreras solidarias por equipos más prestigiosas, la Oxfam Intermon Trailwalker.