¿Sabes qué es la cnidofobia? No, no es la nueva peli de Spielberg, es el miedo a las picaduras de los insectos. Te damos unos consejos para que vuestra convivencia sea más llevadera.
Para empezar vamos a diferenciar a los insectos entre aquellos que pican o inoculan veneno y los parásitos que pican y extraen sangre.
¿Y este bicho qué es?
- Himenópteros (abeja y avispa): sus picaduras son las más frecuentes y no suelen provocar graves problemas. Hay que tener más cuidado si se producen varias picaduras a la vez, si el paciente es hipersensible o si la agresión se ha producido en la zona bucofaríngea.
- Miriápodos: el más conocido es la escalopendra, inocula veneno que produce un dolor algo intenso e incluso enrojecimiento de la piel y algún edema local.
- Arácnidos: las garrapatas, arañas y escorpiones son los más destacados. Las garrapatas son peligrosas, más que por su mordedura, por las enfermedades que nos pueden transmitir. En cuanto a las arañas y escorpiones.
No los provoques, forastero
-Se debe evitar, en lo posible, provocar a los insectos. Cerca de las colmenas o nidos de insectos hay que procurar no realizar movimientos rápidos, bruscos o violentos.
-Evita usar perfumes y ropa con figuras florales o de colores llamativos (amarillos, verdes pistachos, etc.).
-Utiliza repelentes para insectos apropiados y ropa protectora, así como tela mosquitera si duermes al raso.
-Sé cauteloso con la comida, en especial con las bebidas azucaradas, o en áreas alrededor de colectores de basura que a menudo atraen a las abejas.
-Aquellas personas que tengan alergias a picaduras o mordeduras de insectos deben llevar consigo un botiquín de emergencia de epinefrina (que requiere receta médica) y los amigos o acompañantes deben aprender a utilizarlo en caso de una reacción.
-Recomendamos llevar ropa interior ajustada (poliamida, etc.) si vas a dormir en el campo para evitar que las garrapatas se alberguen en nuestras zonas más nobles.
Remedios caseros (por si ya te han picado
)
Las picaduras de insectos suelen ser molestas y dolorosas, pero no son peligrosas a menos que seas alérgico a ellas. Desde siempre se han utilizado remedios naturales para calmar las molestias. Arcilla, saliva, salvia, cebolla, llantén, etc., que estaban fácilmente al alcance y que actuaban de forma inmediata calmando el dolor y reduciendo la inflamación ocasionada por la picadura.
- En la tierra: arcilla y saliva. Este es probablemente el remedio más efectivo y rápido de aplicar en situación de urgencia. En el mismo momento de la picada hacemos una pasta en la mano con arcilla del lugar y nuestra propia saliva, la aplicamos encima de la picadura, dejando que se seque.
- En las plantas: hojas de salvia y llantén. Estas dos plantas son muy comunes y fáciles de encontrar en el campo. Para aplicarlas se recogen las hojas frescas de ambas plantas y se machacan para extraer su jugo. Se extiende sobre una gasa o pañuelo limpio y se deja secar este emplaste encima de la picadura, sustituyéndolo por otro cuando se haya secado. El aceite esencial de lavanda y árbol de té aplicado después sobre la zona alivia el dolor producido, para ello humedecemos un bastoncillo de algodón en el aceite esencial y mojamos con él la zona afectada.
- Busca en la despensa. Una rodaja de cebolla o una pasta elaborada con bicarbonato sódico y agua reducirá el malestar producido por la picadura de una abeja. Para aliviar el malestar producido por la mordedura de una hormiga se puede sumergir el dedo o la zona en cuestión en ajo machacado con zumo de pepino. Para la mordedura de avispa es muy calmante una compresa de algodón empapada en zumo de limón.
- Para espantarlos. Algunas plantas como el geranio repelen de forma natural a los insectos. Diluye dos o tres gotas de aceite esencial de geranio en media taza de agua y aplícala por la zona del cuerpo que quieras proteger. También es útil quemar la esencia en la estancia donde estemos para que así ni se acerquen.
