Cuando la nieve se presenta a su cita anual, las montañas del Prepirineo catalán se convierten en un verdadero paraíso para los amantes de las excursiones con raquetas de nieve. La majestuosidad de los bosques, los cómodos accesos, la tranquilidad de la gran mayoría de los parajes, las dulces formas de las cumbres y la relativa buena distancia entre macizos, son ingredientes que hacen de las excursiones una agradable experiencia.
Os presentamos cuatro excursiones para disfrutar de diferentes macizos del Prepirineo catalán en invierno y con las raquetas. Empezamos por el Puigllançada desde el Coll de la Creueta, un verdadero raid con matices sustanciales de alta montaña; la segunda propuesta son los siempre agradables Rasos de Peguera, bosques nórdicos y aromas mediterráneos en pleno mestizaje. Seguimos con la bucólica Serra d’Ensija, garantía casi absoluta de buena nieve invernal con la estampa de postal que otorga el navideño refugio Delgado Úbeda; y por último una cumbre desconocida pero céntrica y tranquila: Els Cloterons. Y aquí los MAPAS.
El Puigllançada desde el Coll de la Creueta
Descripción
Larga excursión que nos permite andar durante bastante rato por un paraje de alta montaña y por los espacios limpios de vegetación más anchos del Alto Berguedà. En el transcurso del presente periplo el Puigllançada muestra sus enormes proporciones con su máxima plenitud. Cuando estemos en lo alto de la cumbre y giremos la vista hacia el Coll de la Creueta (el punto de partida), veremos que el trayecto que hemos andado para llegar a coronar a la cumbre no es nada despreciable.
Se recomienda evitar el recorrido en días de viento, puesto que la zona es muy propensa a canalizar las ráfagas (sobre todo aquellas de procedencias norteñas). Si hay poca visibilidad por culpa de la niebla, habrá que tener muy buen sentido de la orientación para no errar en nuestros pasos, puesto que sin buena perspectiva visual, los puntos de referencia son difíciles de localizar.
Itinerario
Desde el Coll de la Creueta, tomamos la pista que se dibuja hacia al sur y que enseguida describe una curva para orientarse hacia el NO. Este tramo de pista –que acostumbra a ser visible o estar marcado a pesar de la nieve– bordea la cota 1.952, situada al oeste de la carretera, cota que también podremos subir directamente para ir a parar a la Coma de l’Home Mort (1.922 m), donde encontraremos de nuevo la pista que bordea la primera cota. A pesar del nombre de “Coma" en realidad es un ancho collado. Tenemos dos alternativas que elegiremos según la presencia o ausencia de la nieve. Si los cordales están ventados pero la nieve todavía aguanta en la vertiente sur, lo mejor es continuar por la pista, primero hacia al sur y después hacia al oeste, flanqueando por el costado sur de las siguientes cotas.
Si por el contrario la nieve es bastante abundante en las cumbres, la mejor alternativa es continuar por el cordal subiendo primero el Pla de Baguet (1.996 m), bajando a un collado intermedio de 1.968 m, y ganando después la cumbre del Tarter de Rus, de 2.031 m. La bajada de esta cota hacia al oeste puede presentar tramos de bloques y piedras si la nieve no es abundante. Tanto si hemos optado por flanquear la pista a plena vertiente sur, o por subir las cotas de Pla de Baguet y Tarter del Rus, iremos a parar la ancha Collada de Tortes, a 1.871 m, donde encontramos una cabaña de pastores cerrada, una construcción satélite y un corral. Son las llamadas Barracas de Rus (1h 30m).
Continuamos por la pista o ancho camino (a menudo fácil de distinguir a pesar de que el terreno esté cubierto de nieve), y que hace un largo flanqueo horizontal por la vertiente norte del Tossal del Rus, cumbre que dejaremos totalmente de lado. Cruzamos una zona de grandes prados nevados y entramos en el Pla de Rus, de 1.915 m, y sin necesidad de llegar al collado que cierra el horizonte hacia el SO, encaramos la subida de la Coma situada delante de nosotros en dirección O-NO, y que recibe el nombre de la Coma o Torrente de la Geperuda (2h 40m). La subida de la Coma de la Geperuda es un poco larga, monótona y constante. Se gana desnivel de manera decidida y nos situamos entre el ancho lomo de Costa del Mig (que cierra el horizonte hacia el norte y que concluye en la cota 2.303) y la propia arista de la Geperuda (que cierra el horizonte hacia el sur y que concluye en la cota 2.289).
La coma finaliza en una especie de collado de 2.273 m que, si bien lo presenciamos como tal cuando estamos en lo alto de la coma, a medida que ganamos altura y nos acercamos veremos que se disuelve en una suave subida por una vertiente abierta de mansa y constante pendiente. La cumbre ya es muy visible, horriblemente “adornada" por la gran pantalla metálica y cuadrada que parece un gigantesco panel de anuncios. Ganando altura a media vertiente y siempre hacia el SO coronamos la gran mole del Puigllançada, de 2.408 m (3h 45 m). El descenso se hace por el mismo itinerario. Recomendamos retornar siempre por la pista a partir de las barracas de Rus y evitar así desniveles.
HORARIO: de 3h 30' a 4 horas la subida y unas 3 h la bajada.
DESNIVEL: 782 m de subida y los equivalentes de bajada.
DIFICULTAD: Media -Alta
PUNTO DE PARTIDA: Coll de la Creueta, 1.925 metros.
ACCESO: El Coll de la Creueta es el punto más alto de la carretera BV - 4031, que enlaza la Pobla de Llillet con la Collada de Toses, pasando por Castellar de N'Hug. Debido a su altura, no siempre está abierta en invierno, y es muy probable que hagan falta cadenas para transitar por ella. No obstante estamos en una zona donde las máquinas quitanieves actúan con celeridad.
DÓNDE DORMIR: En el itinerario no hay ningún refugio, ni libre ni guardado. La alternativa más cercana es el Albergue de la Closa, en el pueblo de Castellar de N'Hug (1.400 m). Abierto todo el año. Servicio de restaurante, comedor, bar, WC, duchas, calefacción central, biblioteca, sala de estar y habitaciones de 3, 4, 6, 8 y 10 plazas. 938 257 016. www.cingles.org.
El Puigllançada desde el Coll de la Creueta
Salabardar (Rasos de Peguera) por el Corral de Vallsaduc
Descripción
Curiosamente la cumbre más alta de los Rasos de Peguera no es la cumbre más visitada, este honor lo ostenta la cumbre del Pedró, de 2.051 m de altura, 26 m inferior al Salabardar, de 2.077 m de altura. Los motivos, principalmente, son dos: mejor acceso y el disfrute de una mejor panorámica desde el Pedró que desde el Salabardar. Pero para aquel que visite los Rasos de Peguera más de una vez con las raquetas en los pies y con la intención de hacer una buena marcha, el Salabardar es una asignatura obligatoria. Conocido como el Cap de la Baga de Peguera por los antaño habitantes del pueblo de Peguera, y como Rasos de Dalt por la gente de Berga, el Salabardar es una cumbre poblada de un espeso bosque de coníferas que nos reserva una de las mejores excursiones de la zona. Después de una gran nevada el paraje parece extraído de los mismos bosques de la lejana Laponia. La carencia de camino claro y de perspectiva abierta se verá gratamente compensada por los maravillosos rincones de naturaleza ártica, donde el urogallo, con relativa frecuencia, nos deja ver sus efímeras huellas sobre la inmaculada nieve.
Itinerario
Saliendo del aparcamiento del Collado de la Creu del Cabrer, tomamos dirección norte, cruzando las antiguas pistas de esquí conocidas como “Els Troncs" y "El Bosc", para encontrar un camino muy dibujado en medio del bosque (a pesar de la nieve) que flanquea en horizontal ascendente y va a parar a Corral de Vallsabuc (20 minutos), donde tendremos unas espléndidas panorámicas de la Sierra de Ensija. En la zona de Corral atravesaremos una especie de lomo y empezaremos el largo flanqueo por la vertiente norte de la montaña. Entramos de nuevo en una zona de bosque, bastante cerrada. La senda, no siempre fácil de adivinar cuando hay mucha nieve, dibuja unos grandes zigzags ascendentes a plena vertiente. Lo cierto es que el camino tiene mucha travesía en horizontal y es aconsejable subir bosque a través, a pesar de que las consecuencias puedan ser las de ir a parar a alguna zona especialmente poblada de vegetación, donde el tránsito con raquetas sea un poco incómodo. Subiendo siempre hacia el S-SE llegamos a la parte alta de la Serra, la cual todavía presenta bastantes árboles. Paralelamente encontramos más espacios abiertos y zonas con mayor visibilidad. Los últimos metros por la zona alta, bastante llanos, transcurren hacia el este. Cumbre del Salabardar, 2.077 m. (1h 10m). En la cumbre hay un gran pilote metálico con una bandera. Bajamos hacia el sur, también por bosque, aunque menos espeso, hasta las Collades, a 1.971 m. Bajando hacia el oeste y siguiendo las anchas aperturas del bosque de las pistas de esquí alpino en desuso, llegaremos de nuevo en su punto de partida, la Collada de la Creu del Cabrer, a 1.895 m (2h).
HORARIO: 2h.
DESNIVEL: 182 m de subida y 182 m de bajada.
DIFICULTAD: Media.
PUNTO DE PARTIDA: Collado de la Creu del Cabrer, a 1.895 metros, donde están las instalaciones de la antigua pista de esquí alpino de los Rasos de Peguera (hoy fuera de funcionamiento) y el Bar-Restaurante “La Creu".
ACCESO: La Creu del Cabrer es el final de la carretera asfaltada de acceso a la antigua estación de esquí de Rasos de Peguera, carretera que nace en Berga y que pasa por Espinalbet.
DÓNDE DORMIR: Refugio de Rasos de Peguera (1.805 m). Acceso en coche. Abierto mediante reserva, capacidad 50 personas. Refugio guardado con una zona abierta sin guardar. Servicio de comidas y bebidas, calefacción, duchas y luz.
Salabardar (Rasos de Peguera) por el Corral de Vallsaduc
Serra D’Ensija desde la Pleta Palomera
Descripción
La Sierra de Ensija, de formas amables y a la vez altiva y muy presencial, es una de las montañas más interesantes para la práctica del excursionismo en raquetas de todo el Pre-pirineo catalán. A pesar de su relativa poca altura y el hecho de que está bastante al sur, acostumbra a recibir buenas nevadas y a conservar la nieve una vez ha caído. La abundancia de bosques ayuda a que se cumpla este factor. No es de extrañar que las partes altas y los bosques en las zonas sombrías conserven todavía nieve hasta el mes de mayo, cuando en Saldes la temperatura es más que agradable y podemos ir paseando por las calles del pueblo en manga corta. En la Sierra encontramos, en un emplazamiento de gran belleza, el bucólico refugio Delgado Ubeda. De hecho, la proximidad a la cumbre no justifica una estancia en el refugio, pero poder pernoctar en estas alturas de aspecto polar sí que es una experiencia recomendable que bien aconseja pasar noche entre los muros de esta casita. Como advertencia, hay que tener en cuenta que el refugio, en la época fría, está tan sólo abierto bajo previa reserva.
Itinerario
Se inicia en Pleta de la Villa (1.580 m), al final de la carretera asfaltada que da acceso al Pla de la Palomera, y donde se puede encontrar una barrera que en invierno está cerrada. En este punto continuamos por la carretera asfaltada en sentido ascendente. Encontramos una bifurcación (10 minutos) de una pista secundaria que nace a la derecha y que hay que obviar, continuando por la pista principal asfaltada.
Después de pasar por el puente sobre el Torrente de la Font de Ensija, llegamos a la Font Fría (20 minutos), lugar de recreo a pocos metros de la pista. Aquí dejamos de lado la pista asfaltada y tomamos una senda en medio del bosque (que acostumbra a estar pisada por la propia gente que viene con raquetas) que nace en dirección sur con marcas de PR (blancas y amarillas). Podremos encontrar un cartel indicador a la bifurcación que abandona la pista. Justo pasada la fuente, el camino –que asciende por el medio del bosque en diagonal– traza una línea hacia nuestra derecha (dirección oeste). Entramos en el hoyo de la riera seca (25 min), que es el propio Torrente de la Font de Ensija. En invierno todos los guijarros de la riera acostumbran a estar muy tapados por el manto de nieve. Continuamos encontrando manchas del PR (amarillas y blancas) mezcladas con alguna que otra mancha antigua y medio borrada de GR (blancas y rojas), hasta que abandonamos el lecho de la riera para subir por pendientes nevadas, en medio del bosque abierto, situados a la izquierda de la coma de la torrentera por donde antes subíamos. Ascenso cómodo, a pesar de ganar altura de manera decidida. Más tarde el bosque se abre definitivamente para dar a una zona de prados anchos y con suave pendiente, son las llamadas “Planelles", donde se encuentran la Planella Pequeña y, poco más arriba, la Planella Grande. A partir de este momento los árboles se hacen testimoniales y subimos por pendientes de moderada o baja inclinación. Hay que continuar las marcas y los hitos. El trazado es bastante evidente, subiendo siempre en dirección sur. A partir de este momento las perspectivas se hacen anchas y espectaculares. La subida por la vertiente concluye en la Collada del Clot de Ensija, a 2.159 m (1h 25m) donde encontramos un pilote metálico. A partir de este momento el itinerario ya discurre por los anchos lomos de la parte alta de la montaña. Hay que tomar dirección oeste. A pocos metros encontramos un cartel indicador con una bifurcación de caminos. Continuamos hacia el oeste. Remontamos un suave lomo que presenta un punto de inflexión en el tramo de subida. Una vez traspasado el lomo observamos, muy cercano, el Refugio de Ensija o Delgado Úbeda, situado a 2.160 m (1h 40m). Pasamos de largo la construcción (o paramos a descansar si queremos), para ir hacia la cumbre, continuando hacia el oeste (itinerario evidente y que acostumbra a presentar un trazado definido por el paso de excursionistas o esquiadores). El último tramo hasta a la cumbre dibuja una subida en diagonal por el suavísimo lomo que se desprende hacia al norte de la cadena principal. Llegamos a la arista en la zona cercana a la cumbre, es una especie de pequeño collado en un punto situado a una altura de 2.226 m. A partir de este punto ya caminamos por el propio cordal, muy ancho, evidente, y que acostumbra a estar con el camino marcado. Desde este pequeño collado, que es un verdadero mirador, divisamos al sur la cabeza de la Pared del Ferrús o de la Gallina Pelada. Un buen escenario por los amantes de la escalada clásica.
No obstante la pared nos queda escondida en la vertiente sur, nosotros tan sólo podemos divisar la cabeza blanca de piedra donde concluye el mencionado precipicio de piedra que da nombre a la Sierra. Sin más preámbulos, y continuando por el ancho hilo de la arista, coronamos la cumbre de la Gallina Pelada (2h 20'), también conocido como la Cap del Llitzet (2.317 m). Disfrutamos desde aquí de una gran panorámica de todo el Berguedà. Vértice geodésico, cruz y libro de registro. Para bajar desharemos el mismo itinerario en sentido inverso. Hay que contar poco menos de 2 horas para la bajada.
HORARIO: 2 horas y 20 minutos.
DESNIVEL: 737 m subida y bajada.
DIFICULTAD: Media-Alta
PUNTO DE PARTIDA: Pleta de Vila o Pla de la Palomera (1.580 m).
ACCESO: La Pleta de la Villa o Pla de la Palomera es accesible por carretera asfaltada mediante un desvío que nace a la izquierda de la carretera que va de Saldes en Gósol, justo habiendo pasado el Coll de la Trapa. Letrero indicador en el cruce donde nace la citada de la carretera. La pista no siempre es transitable en invierno por la nieve. Hará falta prever que la excursión se puede alargar bastante.
DÓNDE DORMIR: Se puede dormir en la montaña (Refugio de Ensija) o bien debajo del punto de partida (Gîte de Etape el Roget):
• Refugio de Ensija: También conocido como “Delgado Úbeda". Refugio guardado propiedad de la FEEC. Tiene agua, servicio de comidas y bebidas. Zona de cocina libre. Capacidad para 32 personas y zona libre. En invierno sólo abre los fines de semana con reserva. 616 85 55 35/93 821 25 45/93 825 71 04.
• Refugio Roget, a 1' 3 km de Saldes, a la ctra. Del Mirador, a 300 m a la izquierda, pasada la casa rural de Cal Xic. Guardado, con 17 plazas, lugar para cocinar, WC, duchas, literas con mantas. No tiene servicio de comidas. Regentado por Jordi Camprubí. Contacto: 659 947 020/ 938 751 757. http://www.pedraforca.ppcc.cat / camprucasas@telefonica.net
Serra D’Ensija desde la Pleta Palomera
Els Cloterons por el Coll de la Josa
Descripción
El Cloterons es una cumbre secundaria a caballo entre las comarcas de Berguedà y el Alt Urgell, que pasa completamente desapercibida por la clara competencia de otras montañas más representativas como la propia cordillera del Cadí –que se extiende omnipresente al norte– u otras sierras más grandes y desenganchadas de la gran cadena del Cadí, como sería la Serra del Verde o el arrogante Pedraforca. La cumbre también cuenta con el inconveniente de que –por su propia naturaleza boscosa– no es tan buen mirador como podría ser por su centrada localización. No tenemos espacios abiertos como en el resto de cumbres importantes de la zona, donde todas las zonas altas, sin excepción, están libres de árboles. No obstante, estamos ante un agradable paseo en medio del bosque, sin ningún tipo de peligro objetivo, sin la posibilidad de extraviarnos en medio de la niebla o la nevada. La subida al Coll de la Josa bien vale una breve visita en el fantástico pueblo de la Josa del Cadí, un verdadero rincón bucólico y pintoresco cuyas piedras están saturadas de paz por doquier.
Itinerario
En el propio Coll de la Josa, 1.630 m nace una pista de tierra (que si todo va bien ya estará nevada y será transitable con raquetas), que sube hacia el NO. La pista dibuja una zeta, pero podemos hacer un atajo subiendo recto por tramos de bosque abierto (acostumbra a haber trazas de raquetas). Llegamos a un lugar donde hay una cadena. Podemos seguir por la pista o continuar subiendo de manera más directa por el medio del bosque. La primera alternativa es más cómoda, pero justo el siguiente tramo de pista (pasado la cadena) permanece por una vertiente bastante soleada y que rápidamente se limpia de nieve. La alternativa para hacer la excursión íntegramente con raquetas pasa entonces por subir directo por el bosque, por una especie de sendero que se orienta hacia el NO. Tanto si subimos por la pista, como o si optamos por atajar, los dos itinerarios coinciden más arriba donde la pista vuelve de discurrir en plena vertiente sombría en un largo trazado relativamente horizontal que nos lleva hacia el oeste. La pista es ancha y no tiene pérdida posible. El largo flanqueo es ligeramente ascendente y pasamos por delante de la Font Ginebreda (difícilmente localizable cuando hay nieve); después de dibujar otra “zeta" traspasamos el Coll de la Roca de Millet (1.873 m), desde donde tendremos una panorámica local sobre la siguiente parte del itinerario. Rápidamente volvemos a adentrarnos en el bosque de abetos y pinos negros. La pista continúa dibujando un trayecto bastante horizontal, ligeramente ascendente, por plena vertiente oeste, y dirigiendo nuestros pasos hacia el sur, hasta una bifurcación de caminos. Tomamos la rama de la izquierda que gana desnivel, orientándose gradualmente hacia el este y que concluye la subida a la Collada de les Tores (1.997 m), punto donde dejaremos la pista. (1h 45'). Ahora tendremos que subir en dirección sur por medio del bosque que, afortunadamente, no es demasiado cerrado, y permite subir de manera bastante cómoda con las raquetas.
En lo alto de la montaña atravesamos zonas planas y pequeñas subidas y bajadas, también boscosas, dirigiéndonos con tendencia al SO, hasta culminar la cumbre boscosa del Cloterons, a 2.179 m. (2h 30').
HORARIO: 2 horas y 30 minutos.
DESNIVEL: 549 m.
Media - Baja.
PUNTO DE PARTIDA: Coll de la Josa (1.630 m).
ACCESO: El Coll de la Josa se encuentra a medio camino de la carretera que enlaza Gósol con Josa de Cadí. La mejor alternativa es ir desde Gósol, pueblo al cual accederemos por carretera por el desvío que nace del eje del Llobregat, antes de llegar a Guardiola de Berguedà. Antes de llegar a Gósol pasaremos por Saldes.
DÓNDE DORMIR: Molí de Gósol. Albergue guardado cercano al pueblo homónimo. Contacto: 636 564 310, preguntar por Roger. www.molidegosol.com.
Els Cloterons por el Coll de la Josa
