Yosemite express

Tras la segunda ascensión absoluta a The Nose, en El Capitán, que le llevó sus buenas siete jornadas en pared, el genial Royal Robbins aseguró que las generaciones futuras podrían escalar la ruta en cinco días, incluso en menos. Razón llevaba el americano, pero probablemente no se hacía una idea de cuanto serían capaces de “correr” los escaladores de hoy. Por ejemplo Sean Leary y Dean Potter, quienes resolvían los 31 largos de esta fabulosa línea en 2 horas, 36 minutos y 45 segundos, batiendo el récord de velocidad de la vía por tan so

Jorge Jimenez

Dean PotterTras la segunda ascensión absoluta a The Nose, en El Capitán, que le llevó sus buenas siete jornadas en pared, el genial Royal Robbins aseguró que las generaciones futuras podrían escalar la ruta en cinco días, incluso en menos. Razón llevaba el americano, pero probablemente no se hacía una idea de cuanto serían capaces de “correr” los escaladores de hoy. Por ejemplo Sean Leary y Dean Potter, quienes resolvían los 31 largos de esta fabulosa línea en 2 horas, 36 minutos y 45 segundos, batiendo el récord de velocidad de la vía por tan solo 20 segundos.

El récord estaba en posesión de Yuji Hirayama y el obsesivo Hans Florine desde 2008, cuando batían su propia marca. Para Florine este reto de velocidad es algo personal, y según él mismo afirma ya anda planificando un nuevo asalto express al gran icono del big wall. Además no le amedrenta tener que disputarse la marca contra mitos vivientes de la escalada como Potter o los hermanos Huber, a los que en su día ya les arrebató el récord con una firmeza impecable. Cuando se enteró del nuevo crono a batir, solo dijo: “Ha llegado el momento de dejar el sofá y ponerme manos a la obra”. Presumimos que su sofá está vacío de nuevo.

El propio Hans Florine fue quien inició esta fiebre por la velocidad en The Nose, cuando en 1990, espoleado por la ascensión de Peter Croft y John Bachar, otros dos iconos del free climbing americano, rebajó las 9 horas y 17 minutos que éstos habían establecido cuatro años antes. Lo que viene después ya es historia de la escalada en el valle.