MTB

De Noruega a Santiago en bici

Ultreia Europa, una auténtica aventura bikepacker

Susana Gómez Castiñeira

Ultreia Europa
Ultreia Europa

Si la bicicleta es tu medio y te sobran los "por si acasos", el bikepacking es una forma fantástica de viajar. Yo no había hecho cicloturismo con anterioridad, pero me embarqué en esta aventura pedaleando 4.000 km por Europa, uniendo Trondheim (Noruega), con Santiago de Compostela. Un viaje que me ha marcado, porque sin duda alguna "menos es más".

Si comienzas a leer este artículo, quizás busques información práctica y técnica de lo qué es el bikepacking, una bici gravel y qué clase de material es necesario e imprescindible para cargar en un viaje de aventura, turismo y deporte de tres semanas. Seguro que cuando termines de leerlo sacarás tus propias conclusiones y decidirás si es un tipo de viaje que te interesa y si tú lo harías de esa misma forma o no. Porque en realidad, cada aventura es tan personal y se vive de tan diferente forma, aún yendo acompañada, que lo que yo considero totalmente imprescindible, a otro podría resultarle totalmente innecesario. Por ello, tener experiencia en algún viaje similar, donde portes con todo lo que se necesita para llegar a tu destino durante más de una semana, al menos, pues es un punto a tu favor. Sea como sea, yo me subí a una bicicleta y uní Trondheim (Noruega) con otro punto en el mapa (Santiago de Compostela) en tres semanas, a un ritmo no apto para hacer turismo tradicional y a una media de 200 km diarios hasta completar los 4.000 km necesarios para trazar una línea continua en mi mapa aventurero.

Ultreia Europa

Ultreia Europa

Nunca había hecho cicloturismo con anterioridad, ni 200 km en una sola jornada (experiencia en rutas largas quizás, pero a pie), ni había montado en una bici gravel (descubrimiento fantástico para los que les guste ir sobre dos ruedas pisteando y cogiendo también asfalto, sin mucha exigencia técnica y más velocidad). El resultando de este viaje al que le llamamos Ultreia Europa, fue una lección de vida.

Cada aventura es tan personal y se vive de tan diferente forma, que lo que uno considera totalmente imprescindible, a otro podría resultarle totalmente innecesario

Me embarco en mis viajes aventura sin ser técnicamente buena, y en esta pues tampoco. Cambiar una rueda, llevar el mantenimiento básico de mi bici, resultó doblemente costoso y a veces inaccesible a mi entender, por falta de horas y situaciones vividas previamente. Vivimos en una sociedad "necesitada" para poder dar un solo paso. Y con ello explico lo de "lección de vida" y el concepto bikepacking. Para dar un paso sólo se necesita hacerlo. No es necesario equiparse cual astronauta que va a pisar la Luna. En mi bici cargué solo un poco de más, y ese "poco" y esos "por si acasos" duraron tres jornadas en mis bolsos. Para correr hace falta ganas y piernas. Sólo eso. Créeme. Para viajar por Europa en bici de la manera que yo lo hice, hace falta: ganas de ir en modalidad ligero (abrigo, saco, funda vivac/tienda para poder dormir donde terminásemos la jornada, hornillo, botiquín, herramientas, gps/mapa) y una bici. Solo eso. Créeme. No me olvido del dinero en efectivo o tarjeta para comer y beber. Esto habrá que hacerlo, claro está. Y cuando, efectivamente, puedes rodar y vivir perfectamente con tan pocas pertenencias, te das cuenta de cuan consumista somos y nos hacen... Necesidades autoimpuestas e impuestas socialmente. Ya ves.

Ultreia Europa

Ultreia Europa

Una vez fui consciente de ello, pasé literalmente a disfrutar del estado bikepacking, dígase un tipo de cicloturismo pero sin bici tipo "caracol" (con la casa a cuestas), algo que te hace ver las cosas desde una perspectiva mucho más "monje budista", por llamarle de alguna forma. Es sorprendente darse cuenta de todo lo que nos sobra sumando y sumando kilómetros a lo largo de tres semanas, en los que recorres y descubres países (Noruega, Dinamarca, Alemania, Holanda, Bélgica, Francia y España) a un ritmo sin muchas pausas, en busca de supermercados para el avituallamiento y disfrutando de las rutas de una forma un poco más deportiva y menos turística. A pesar de ello, rodar centenares de kilómetros en cada país, aunque sea de esta forma, es igualmente embriagador y puedes captar perfectamente los cambios de cultura y forma de vivir de cada país cruzado. ¿Eso no es hacer también turismo? Claro que sí.

¿Ruta en bici, en autosuficiencia, más de 4.000 km por Europa, disponiendo de 22 días?

Os contaré qué necesite, qué ruta trazamos y qué posibilidades hay de hacer rutas en bici gravel por Europa, pero antes necesito explicaros el porqué de haberme llevado una lección de vida, otra más, de esta aventura que apareció hace menos de un año junto con mi amigo y compañero de sueños Sergio. Constantemente me sorprende el cómo, en general, nos ponemos muros delante de nuestros sueños personales, sean de la índole que sean. Ejemplo: ¿Ruta en bici, en autosuficiencia, más de 4.000 km por Europa, disponiendo de 22 días? Ejemplo "tipo" de respuesta lógica: imposible, jamás he cogido una bici, tampoco una bici cargada, es más kilometraje que el Tour de Francia (3.329 km) y la media diaria es más de la que hace un profesional... Pues he de decir, y tengo varios ejemplos personales de ello, que se puede si se quiere. Con jornadas de 14 horas, de 8 a 22 horas, parando lo justo para comer y descansar un poco (muy poco), a un ritmo de 19 km/h (aquí se ve mi nivel en bicicleta claramente), salían, milagrosamente, la cantidad de kilómetros que necesitábamos hacer al día para poder llegar a Santiago.

Ultreia Europa

Ultreia Europa

Cada mañana, durante 21 días (dos más los invertí en arreglar una rueda rota), me levanté pensando en la ruta del día y pensando que sería complicadísimo llegar a los 200 km. Cada noche, durante 21 días, me acosté habiéndolos hecho... Aún ahora continúo sin ser consciente de ello y teniendo muy claro que Sergio, mi compañero de rodada, podría haber hecho 50 km más cada día sin mucho más esfuerzo y sí siendo un poco más veloz en el ritmo medio (algo a lo que yo no estaba suficientemente preparada). Cantidades abrumadoras para deportistas populares como nosotros y demostrando que en la vida nada es imposible mientras se intente. Pedalada a pedalada, venciendo miedos y desniveles, adaptaciones musculares y agotamiento, más lenta que rápida, llegamos a Santiago tras cruzar el camino Francés en nuestro último tramo en España cargado de peregrinos con ganas de disfrutar de sus pasos y todo lo que conlleva el transitado Camino de Santiago. Un viaje muy interesante por su forma, que me ha dejado cavilando todavía ahora... Porque sin duda alguna "menos es más".

Si la bicicleta es tu medio y te sobran los "por si acasos", el bikepacking es una forma fantástica de viajar. Sin duda alguna yo repetiría , cambiando el recorrido, claro está, y adentrándome por Europa en alguna de las 15 rutas "Eurovelo" que nos facilitan mucho la organización del recorrido bajándonos simplemente el track o solicitando los mapas en papel (algo que no es apto para ir en modo "ligero" pero sí con alforjas y más espacio). Y si Europa se te queda pequeña, pues hay multitud de rutas por el mundo para disfrutar y que se pueden conseguir en webs especializadas sin mucho problema.

Si la bicicleta es tu medio y te sobran los "por si acasos", el bikepacking es una forma fantástica de viajar

15 rutas Eurovelo (más de 70.000 kilómetros)

• Ruta Atlántica: North Cape – Sagres 8.168 km

• Ruta de los Peregrinos: Trondheim – Santiago de Compostela 5.122 km

• Vía Romea Francigena: Londres – Roma, Birindisi 3.900 km

• Ruta del Sol: North Cape – Malta 7.409 km

• Ruta del Báltico al Adriático: Gdansk – Pula 1.930 km

Ruta de Europa del Este • North Cape – Atenas 5.984 km

• Ruta del Telón de Acero: Mar de Barents – Mar Negro 10.400 km

• Ruta del Rin: Andermatt – Hoek van Holland 1.320 km

• Ruta del Ródano: Andermatt - Mar Mediterráneo 1.115 km

• Ruta de las capitales: Galway – Moscú 5.500 km

Ruta Centroeuropea: • Roscoff – Kiev 4.000 km

• Ruta del Atlántico al Mar Negro: Nantes – Constanta 4.448km

Ruta del Mediterráneo: Cádiz – Atenas y Chipre 5.888 km

Circuitos:

• Ruta del Mar Báltico: 7.980 km • Ruta del Mar del Norte: 5.932 km

Ultreia Europa

Ultreia Europa

El equipo que llevé:

• Botiquín básico. • Luces para bici y frontal pequeño. • Saco de dormir. • Funda vivac. • Esterilla. • Plumífero ligero. • Chaqueta y pantalón ligero impermeable. • Pantalón pirata de algodón y camiseta interior larga de lana merino • Dos culotes (podría haber llevado solo uno, pero hay que tener en cuenta que las infecciones pueden hacerte abandonar el viaje, aquí yo lo tenía claro y el "dos" fue mi elección) • Dos maillots. • Dos pares de calcetines. • Dos de guantes (cortos y largos) • Un buff. • Manguitos y chaqueta segunda capa (cortavientos mejor). Yo me olvidé los manguitos y mi chaqueta no era cortavientos (pero lo suplí, cuando fue necesario, con mi capa impermeable) • Gps funda estanca. • Móvil funda estanca. • Batería de repuesto. • Taza o cazo . • Hornillo. • Cubiertos y navaja. • Bombona (cuidado con este detalle, nosotros hemos tenido verdaderas dificultades en conseguir una bombona para nuestro hornillo. No en "cualquier sitio" las venden. Aconsejo buscar antes de llegar al punto de partida, siempre que se llegue en avión, un lugar para su compra) • 2 Cámaras de repuesto y parches, herramientas básicas. Sergio pinchó doce veces, algo poco normal. Tiene claro, tras este viaje, que debería haber puesto ruedas tubulares. Yo no pinché ni una sola vez (y no tenía tubulares) • 1 fuelle potente. Aquí no se debe escatimar en espacio o precio. Un buen hinchador te hará más feliz, en el caso de pinchar mucho... • Una mochila ligera (nosotros llevamos de las que se pliegan y ocupan la mitad de un puño). Es una comodidad a la hora de llevar la comida o cosas de rápido acceso. • La rueda delantera de Sergio tenía un buje dinamo para poder cargar el gps o navegar con el móvil sin ningún problema de batería. Es básico para un tipo de viajes como este. Nosotros nos "apañamos" con solo un buje dinamo, pero lo ideal es que cada bici lleve el suyo. • Gafas con varias lentes (transparente y otra de alta protección) • Casco. • Zapatos bici que te permitan caminar (si llevas calas), las específicas de "gravel" van geniales.

Más información: lailusionmuevemispiernas.com

5 rutas en MTB para hacer una vez en la vida

Relacionado

5 rutas en MTB para hacer una vez en la vida

10 rutas imprescindibles en MTB

Relacionado

10 rutas imprescindibles en MTB

Suiza a golpe de pedal

Relacionado

Suiza a golpe de pedal

Bikepacking en el Jordan Trail

Relacionado

Bikepacking en el Jordan Trail