¿Está homologado mi material? Todo lo que necesitas saber...

¿Sabemos qué exigir cuando compramos material para nuestras actividades en montaña?

Tino Nuñez

¿Está homologado mi material?
¿Está homologado mi material?

Las homologaciones y certificaciones nacieron hace décadas para proteger al consumidor frente a productos inseguros o defectuosos. El áspero mundo de las homologaciones resulta un poco más amable desde que Europa decidió crear sus propias exigencias y de ello hablaremos seguidamente, pero no sin antes aclarar que certificación u homologación son términos en la práctica muy similares, si bien una homologación se considera siempre una certificación oficial.

EUROPA NOS PROTEGE
Desde hace una treintena de años la Unión Europea ha establecido que los productos de consumo que puedan entrañar molestias o riesgos para los ciudadanos superen unas normas y pruebas específicas. Es el caso, entre otros, de los electrodomésticos, de los equipos para prevención de riesgos laborales, juguetes, dispositivos eléctricos y ciertos materiales deportivos (como por ejemplo los destinados a la escalada). El comprador debe buscar siempre el marcado oficial del logotipo CE, que significa Conformidad Europea y que incluya unas instrucciones claras de uso, así como de vida útil del producto y almacenaje. Ese marcado CE resulta obligatorio sólo en productos para los que la Unión Europea tiene normativas específicas, puede abarcar desde unas simples gafas de sol a un freno para descenso de barrancos, independientemente del país donde haya sido fabricado.

El marcado CE debe ser fácilmente legible tanto en el propio producto, como en el envase y en las instrucciones, confirma –salvo fraude- que el fabricante ha evaluado elproducto y que cumple los requisitos de seguridad, sanidad, y protección del medio ambiente obligados por la UE.

EL CASO PARTICULAR DE UN EPI
Un EPI es un equipo de protección individual que protege al usuario de posibles riesgos que pongan en peligro su seguridad o salud. En el Reglamento UE 2016/425 se establecen procedimientos estrictos para la homologación de tres categorías de EPI:
 - Categoría I: protección de riesgos menores, un buen ejemplo serían las gafas de sol.

 - Categoría II: protección de riesgos medios, entre los ejemplos más conocidos para la montaña están el casco y un piolet.

 - Categoría III: concebidos para proteger de riesgos graves o mortales. Las cuerdas para alpinismo o barranquismo y los mosquetones de escalada figuran entre los más utilizados por millones de personas en Europa.

De manera general, se puede considerar que las normas europeas son bastante exigentes, pero aún mejorables y no faltan especialistas que consideran un poco “pobres” las vinculadas a productos concretos, como los cascos de montaña o los crampones.

OTROS EJEMPLOS
Hay productos que se venden en la Unión Europea, que cumplen una normativa voluntariamente –no es obligatoria- para distinguirse de otros competidores y que no están obligados a llevar el sello CE. En montaña el caso más interesante es el de los sacos de dormir, que permite comparar de forma realista el aislamiento térmico de diferentes productos y marcas, que cumplan la norma EN 13537. En ella se detallan qué pruebas de laboratorio deben hacerse a dos maniquís que simulan a personas de diferente sexo y de 25 años, 1,73 m y 73 kg en el caso de los hombres y 1,60 m y 60 kg en el caso de las mujeres.

Aunque Europa no obliga a que todos los sacos de dormir cumplan esa normativa, sí puede ser utilizar en un juicio como referencia técnica en el caso de que cualquier confeccionista cometa fraude o engaño al declarar temperaturas de utilización exageradas o irreales, algo que por desgracia ocurrió con especial virulencia desde 1990 a 2005.

Muchos productos utilizados para actividades en montaña no están certificados CE porque aún no existe una normativa específica, como es el caso del calzado, de la vestimenta o de las tiendas de campaña, pero sí pueden superar pruebas adicionales de prestaciones o controles de calidad rigurosos si el fabricante se ha preocupado de ello. La homologación UIAA (Unión Internacional de Asociaciones de Alpinismo), de carácter mundial y voluntaria, supone una garantía de calidad adicional al CE, y es muy recomendable para productos que protejan de caídas: alpinismo, escalada en roca, barranquismo , ferratas y espeleología.

CÓMO EVITAR ENGAÑOS
La globalización de la venta de material de montaña enviado al consumidor desde cualquier parte del mundo, conlleva indudables ventajas, pero también agresiones contra el medio ambiente y contra la integridad del consumidor en casos extremos.

En estos últimos años algunos productos de muy baja calidad y precio sorprendentemente reducido son vendidos por algunas de las grandes plataformas de comercio electrónico, sin comprobar la veracidad de la información facilitada y el resultado real que proporcionan. En los casos más extremos hemos detectado cuerdas que resisten sólo la quinta parte de lo declarado o mosquetones calificados como auténtico material de escalada cuando su uso es de tipo ornamental. Al advertir por correo electrónico a algunos fabricantes del peligro mortal al que somete a sus posibles clientes, no han faltado contestaciones agresivas en las que el manufacturador recrimina públicamente que se le ponga en duda y exige que simplemente se devuelva el producto si no se está conforme.

De manera general debemos evitar imitaciones de bajo coste con apariencia similar a productos de reconocido prestigio, producidas por marcas desconocidas y a menudo en países asiáticos. Igualmente si en la imagen de un material destinado a maniobras de seguridad (como por ejemplo un piolet) no puede leerse de forma clara el CE o esasletras poseen entre sí una separación mayor de la habitual. Si las letras no poseen diferente altura o no alcanzan los 5 milímetros, la certificación será falsa. La promoción de estos productos de bajo coste en vídeos tutoriales de deportistas poco cualificadospero con bastantes seguidores, se ha visto reforzada durante estos últimos años de pandemia y suponen un auténtico peligro.

Para mayor tranquilidad nuestra, debemos adquirir el material que tenga elevada responsabilidad –pensemos en un arnés o en unos crampones- sólo en comercios fiables y en caso de duda contactar con nuestra federación autonómica de montaña o con AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación)