Botas de caña baja, la alternativa al calzado estándar

Muchos consumidores de calzado de montaña aún son un poco de categorías absolutas, tipo zapatilla o bota, blanco o negro, sin matices. Y sin embargo hay categorías intermedias que merecen conocerse y u tilizarse más.

Tino Nuñez

La alternativa al calzado estándar
La alternativa al calzado estándar

Quizá no te convencen del todo las botas de montaña ni tampoco las zapatillas de trekking, por las experiencias que has sufrido en tus actividades. Ysin embargo preferirías tener un solo calzado para casi todo. Las botas de cañabaja pueden darte la respuesta a estas inquietudes.

¿Bota o zapatilla?

Hace décadas nadie cuestionaba la necesidad de caminar con botas para llevar los pies suficientemente protegidos en montaña, pero los practicantes más jóvenes comenzaron a utilizar zapatillas deportivas, procedentes del mundo del tenis y del baloncesto, para ir más ligeros y disfrutar de mayor flexibilidad en la pisada. En España a partir de los 90 entraron con mucha fuerza las zapatillas de trekking y fueron muchos quienes abandonaron definitivamente las botas, salvo para montaña invernal. Los partidarios de las botas defienden la longevidad y protección que ofrecen en terrenos difíciles o pedregosos, pero en privado suelen quejarse de su peso o de que son caras; los adeptos a las zapatillas alaban su comodidad y libertad de movimientos, pero reconocen que no son lo mejor en pedreras o si vas cargado con una pesada mochila. Si buscas una solución intermedia, existe.

A qué nos referimos exactamente

Las botas de caña baja, también conocidas por algunos especialistas como semibotas, mtienen una altura de caña superior al de una zapatilla e inferior a la de una bota estándar. La idea es que proporcionen más libertad de movimientos de tobillo que una bota, pero con más protección que una zapatilla, mejorando sujeción y polivalencia. A menudo la altura del taqueado de la suela alcanza los 4 milímetros, acorde con el fin para el que han sido concebidas en su mayoría: senderismo y trekking.

Traducido a números este tipo de opción intermedia tiene la caña unos 3-4 centímetros más alta que una zapatilla y es unos 5 centímetros más baja que una bota. Su precio lógicamente es intermedio y el aumento de peso respecto a una zapatilla es bastante bajo (alrededor de un 10 por ciento o de 40 a 70 gramos más el par). El incremento de precio respecto a las zapatillas también resulta razonable: de 20 a 40 euros más.

Si el fabricante incluye etiquetado en inglés, a menudo se distinguen de los demás porque en el nombre incluyen la palabra “mid” (medio/a) y de hecho algunas de las firmas más prestigiosas ofrecen el mismo diseño en las dos versiones: zapatilla y bota de caña baja.

No todos los puntos de venta y manufacturadores llaman igual a este tipo de calzado y encontrarás que algunos simplemente lo denominan zapatilla alta o bota de caña media, lo que genera una cierta confusión, sobre todo en las compras on line.

Perfil de usuario

A quienes más va a convencer es a las personas que habiendo utilizado gran variedad de calzado, están un poco hartas de las desventajas de las zapatillas y de las botas. También gustarán a buena parte de las personas que buscan un calzado ligero pero polivalente para terrenos cambiantes de montaña, un único par para viajes que aglutinan escenarios muy diversos (como turismo urbano y visitas a enclaves naturales) o grupos deportivos concretos (como escaladores que alternen la media y baja montaña casi todo el año con la alta montaña estival). Suelen dar también buen resultado como calzado invernal para ciudad y para actividades mixtas tipo Camino de Santiago

Este estilo tan americano de calzado, también es fabricado por algunas firmas europeas, pero lógicamente por su menor demanda suele tener una presencia reducida en los establecimientos de venta. ¡Toca visitar varias tiendas para ver qué modelo te convence más! En la mayoría de los casos encontrarás opciones de 65 a 200 euros dependiendo de sus materiales, calidades y si incluyen o no membrana impermeable y transpirable. Échale un vistazo a los modelos para fast hiking/senderismo rápido, porque suelen tener buena flexibilidad para una pisada más natural, lengüetas tan blandas como cómodas y un peso que no suele superar los 800 gramos/par.

Advertencia importante

Es muy importante comprobar que la parte más inferior de la caña no se clava en el tendón de Aquiles ni lo comprime, porque puede provocarte desde unas ampollas de rápida aparición hasta una tendinitis grave en recorridos largos. Quizá el modelo que más te guste a simple vista sea el que al probártelo y por apenas un centímetro se te hinca con crueldad en tu pie ¡tendrás que optar por otro en el que varíe ligeramente la altura de la caña!