Una cordada americana firma la primera ascensión del corredor Hypa Zypa hasta la afilada cima de la Citadel, en el remoto macizo de Kichatna. Un kilómetro vertical de privaciones para inaugurar la primavera en el Gran Norte.
Estribaciones abruptas, paredes mordidas por el cortejo del hielo y el paso del tiempo, y cumbres como agujas por encima de los 2.000 metros: las montañas de Kitchatna son un atrayente reto para los alpinistas que prefieren encontrar referencias salvajes, rincones remotos y experiencias en la soledad de los espacios prístinos. Los americanos Ben Erdmann y Jess Roskelley y el danés Kristoffer Szilas bien responden a esa definición. El trío regresa a casa tras abrir 1.100 metros superando trances de toda condición (AI5 , M6 y A3 para más señas) en su fructuoso intento por inaugurar el Hypa Zypa Couloir, en la vertiente este del Citadel. Una actividad sobresaliente, y bastante espeluznante, para dar el pistoletazo alpino a la nueva estación en el Norte americano.
Aunque la idea original de la cordada era repetir el corredor Supa Dupa abierto en 2003 por un equipo liderado por Mike Turner, tras aterrizar con la avioneta el 4 de abril, las condiciones de hielo se presentaban ideales para firmar un nuevo itinerario. Ligeras congelaciones en los dedos, 70 horas de frenética escalada, dos vivacs y la cumbre completaban el bagaje de una expedición que parecía suficiente para la paciencia de la meteo. Nada más descender la temperatura cayó 15 grados, impidiendo afrontar cualquier otra ascensión en condiciones. Ni los hornillos funcionaban. El termómetro marcaba -30º: uno debe tener mucha suerte con el clima al acudir tan pronto en primavera a Alaska, y nosotros tuvimos una suerte extrema durante la escalada, explicaba Szilas antes de encomendarse a la diosa Fortuna. Era la primera vez que cualquiera de nosotros acudía a las montañas de Kitchatna; aunque hemos compartido una docena de expediciones alrededor de todo el Mundo y puedo decir que, de lejos, esta es la región donde más frío hemos soportado. Solo acuden una o dos expediciones a este área cada temporada, por lo que es una auténtica aventura en soledad.
Remoto, frío, exigente Alaska
Una cordada americana firma la primera ascensión del corredor Hypa Zypa hasta la afilada cima de la Citadel, en el remoto macizo de Kichatna. Un kilómetro vertical de privaciones para inaugurar la primavera en el Gran Nort