Cómo disfrutar Andorra en bicicleta

Con el buen tiempo, sus carreteras se llenan tanto de ciclistas profesionales como amateurs.

Marina Saz

Andorra en bicleta / FOTO: Principado de Andorra
Andorra en bicleta / FOTO: Principado de Andorra

¿Recuerdas esos veranos de tu infancia cuando tu única forma de moverte era la bicicleta? Nosotros sí, y nos ha entrado morriña. Por eso os queremos enseñar una buena opción para moverte sobre dos ruedas: El Principado de Andorra.

Gracias a su geografía, es un destino ideal para practicar este deporte. Cuenta con 200 km de carreteras a lo largo de 20 serpenteantes puertos de montaña. Algunas de estas rutas son tan exigentes que forman parte del itinerario de pruebas de primer nivel como el Tour de Francia o la Vuelta a España.

De hecho, la Vuelta disputará su penúltima carrera en el territorio andorrano el 14 y 15 de septiembre, y se perfila como una de las etapas decisivas por su alta exigencia física.

Dejando a un lado la alta competición, en Andorra lo han dispuesto todo para que cualquier aficionado pueda encontrar su sitio en la extensa oferta de rutas. Según el nivel, o el tiempo que se desee, se ofrecen rutas guiadas que se ajustan a cada persona, teniendo en cuenta siempre el grado de dificultad de la actividad y la preparación de la persona o del grupo.

Andorra en bicleta / FOTO: Principado de Andorra

4 recorridos para disfrutar de los lugares más emblemáticos de Andorra:

El Forn: Moderada (Canillo) - Con salida en el núcleo urbano de Canillo, este itinerario nos lleva hasta el sector El Forn de Grandvalira. Por el camino es posible visitar la iglesia románica de San Miquel de Prats, que representa a la perfección el estilo rural típico de Andorra.

Coma de Ransol: Moderada (Canillo) - Ruta accesible que se inicia en la rotonda antes de El Tarter en la CG-2 y sube en dirección Ransol ofreciendo unas espectaculares vistas del valle de Incles.

Coll d’Ordino: Difícil (Ordino) - El recorrido empieza en Ordino y se eleva hasta el Colllado de Ordino. Se trata de un puerto de 1ª categoría habitual en todos los campeonatos de contrarreloj que se celebran en Andorra.

Coll de la Gallina: Muy difícil (Sant Julià de Lòria) – Itinerario muy exigente que sale de Aixovall y que sube hasta el Coll de la Gallina.

Y para aquellas personas que quieran vivir experiencias más intensas, el Principado cuenta con una red de rutas señalizadas y descensos libres, para disfrutar de la bibicleta de montaña en todo su esplendor.

Además Vallnord Pal-Arinsal cuenta con el Vallnord Bike Park, una de las áreas más espectaculares del sur de Europa. Este parque cuenta con una zona de 40km de descenso y desniveles que superan los 1.000 metros, con un total de 29 circuitos de diferentes características que aprovechan las pendientes de las pistas de esquí y son aptas tanto para profesionales como para principiantes. A su vez, es sede de mundiales de BTT y de la Copa del Mundo de BTT.

Andorra en bicleta / FOTO: Principado de Andorra

4 rutas de BTT:

El camino de las Pardines: Muy fácil. (Escaldes-Engordany) - Itinerario sencillo y familiar de poco más de tres kilómetros. Empieza en el lago de Engolasters y sube hasta la Borda de las Pardines. A lo largo del recorrido se puede disfrutar de las vistas panorámicas.

Encamp – Els Cortals: Moderada (Encamp)- Ruta que transcurre por el sector de Solanelles de la estación Grandvalira. En función del nivel, el ciclista podrá decidir si hacer la primera parte y quedarse en Orri del Cubil o continuar el ascenso hasta llegar a Pessons.

Camí del Gall: Difícil (Canillo) – Un sendero especialmente recomendable para los aficionados que buscan un recorrido técnico, pero a la vez una ruta con un toque de desafío. El Camí del Gall conecta Canillo con Soldeu y la excursión se puede iniciar desde ambas localidades.

La Rabassa – Pic Negre: Muy difícil (Sant Julià de Lòria) - Ruta exigente físicamente por su desnivel y altura. Antes de llegar al Refugio de La Rabassa nace una pista que nos llevará a lo más alto de Andorra. El ascenso transcurre por un paraje de alta montaña con vistas panorámicas de todo el país.

Las múltiples posibilidades que ofrece la bicicleta y su versatilidad, junto con el entorno que nos ofrece la montaña, hacen del ciclismo una práctica de referencia para cualquier visitante.