La operación financiada por la familia de Mariano Galván en el Nanga Parbat ha llegado a su fin. Así informaba el líder de la expedición privada, Mirza Ali, encargado de realizar una nueva batida en el área donde desaparecían Mariano y Alberto Zerain a finales de junio.
Así lo contaba hoy el propio Mirza en un comunicado:
“Queridos amigos, es muy triste informar que tras diez días de búsqueda la misión concluía ayer 16 de julio tras una batida final en la zona del accidente en la arista Mazeno, por encima de los 6.000 metros de altura.
La familia y amigos del alpinista argentino Mariano Galván nos solicitaban esta misión. Teníamos muchas esperanzas en encontrar a alguno de ellos con vida, a pesar de que había pasado mucho tiempo. Aceptamos este desafío y movilizamos rápidamente desde Islamabad al equipo de Karakorum Expeditions para movernos inmediatamente a la villa de Chillas, la puerta al Nanga Parbat.
Nuestro equipo consistía en ocho miembros procedentes de la aldea de Shimshal:
Mr. Mirza Ali (Líder)
Mr. JalalUddin
Mr. Arashadkarim
Mr. Eid Muhammad
Mr. Shifa Ali
Mr. Dilbar Khan
Mr. Aziz Qurban
Las coordenadas del GPS fueron compartidas y discutidas y finalmente decidimos que la misión podía merecer la pena. El equipo dejo Chillas el 7 de julio para llegar al glaciar Diamir para establecer nuestro campo base en el lado norte de la arista Mazeno. Desde allí se realizaron dos intentos pero no encontramos una ruta potencialmente segura para acceder a la arista, por lo que el equipo se dividió en dos para intentarlo por la vertiente sur de la arista.
La ruta seguida por los dos alpinistas, Alberto y Mariano, también fue intentada, pero debido a lo tardío de la temporada la arista estaba muy expuesta a la caída de rocas y hielo. La arista no era posible ni segura. El equipo encontraba un paso a 5.108 metros desde donde tratar de encontrar un acceso seguro. Pasábamos dos noches en ese punto.
El segundo equipo seguía buscando una ruta por el lado sur. Lograban escalar por la arista suroeste hasta los 5.900-6.000 metros, donde encontraban las huellas de los escaladores desaparecidos. Allí se fijaban 1.200 metros de cuerda fija para asegurar la ruta. La travesía en roca era altamente peligrosa, la nieve y el hielo estaban en proceso de derretirse. También encontramos un altísimo potencial de colapso en los seracs.
Analizando todos estos peligros decidimos no realizar la travesía. No era imposible pero el riesgo era demasiado alto. Se realizó una escalada a un pequeño pico de roca sobre el punto en el que los alpinistas habían realizado la travesía y desde donde se podía ver el punto de ruptura de la avalancha que los sepultaba. Tras consultar entre nosotros el equipo informó a la familia de Mariano en Argentina de que la ruta hacia la avalancha no era segura y que habíamos decidido realizar una última búsqueda en helicóptero. La idea inicial era descender desde el helicóptero para realizar una búsqueda en tierra en la zona de las grietas, además de la búsqueda visual desde el helicóptero. Finalmente los pilotos y los expertos en aviación no aprobaban esta misión debido a las condiciones.
Finalmente, el 16 de julio, un helicóptero del Escuadron 5 del ejército paquistaní, conocido como “The Fearless”, cargaba a Mirza Ali y sobrevolaba la zona del accidente. Los pilotos, el Teniente Coronel Aamir y Maj. Tariq realizaban cinco batidas a muy baja altitud, desde donde realizamos fotografías y vídeos. Las huellas seguían siendo visibles en la arista, al igual que el punto de ruptura de la avalancha. Por ello nuestras conclusiones fueron las siguientes:
1. Los alpinistas fueron expulsados fuera de la arista, sepultados por una fuerte avalancha.
2. La avalancha se produjo alrededor de 6.200 metros
3. Tras la avalancha se pierde la pista de los alpinistas.
Razones para dar por finalizada la búsqueda:
1. El área de búsqueda tenía un gran potencia de colapso de seracs
2. La travesía de roca estaba demasiada expuesta a la caída de seracs y rocas
3. El descenso con cuerda desde el helicóptero no fue aprobado
4. Excavar en el lugar de la avalancha sobre los 6.000 metros era muy peligroso
5. La ventana de buen tiempo llegaba a su fin
Como líder de equipos de búsqueda y rescate quiero añadir tres puntos para futuras acciones:
1. Es inevitable lanzar un equipo de búsqueda y rescate nacional para estos accidentes y para tener capacidad de respuesta inmediata, que debería ser parte del equipo de gestión de Desastres Nacionales (NDMA).
2. Los equipos privados de rescate y los helicópteros necesitan ser alentados en las zonas de montaña y en las áreas turísticas.
3. Se requiere mayor entrenamiento sobre navegación para los equipos locales, estudios de imágenes en Google y capacidad de llevar a cabo análisis y reportes.
Queremos reiterar nuestras mayores condolencias a la familia de los alpinistas desaparecidos, sus amigos y sus naciones.
Finalmente, quiero agradecer al experto equipo de Karakorum Expeditions su trabajo, por dar lo mejor de sí mismos en la montaña a pesar de las condiciones encontradas en el Nanga Parbat. No podíamos correr más riesgos. Esta misión ha sido una experiencia para aprender de cara a futuras expediciones de rescate en la montaña".