Seis días agotadores acaban en una llegada terrorífica

Alex Txikon

Seis días agotadores acaban en una llegada terrorífica
Seis días agotadores acaban en una llegada terrorífica

Tras seis  días fuera de casa (del CB) y una llegada terrorífica, es tiempo de reflexionar. La fatiga acumulada y las situaciones extremas me han pasado factura y dificultan mi descanso. Por lo tanto, a estas horas de la madrugada, he querido sacar todo lo que llevo dentro y haceros participes de lo vivido durante estos últimos días. ¡Espero que lo disfrutéis conmigo!

El día 17 salen Carlos y Chepal para el C1 a 6050 metros para pasar su primera noche de altura para ambos. Quiero destacar la labor de 10 personas para equipar en tan solo 6 días la famosa cascada del Khumbu, peligrosa, exigente y que requiere de muchísimo compromiso. Ha sido llevada a cabo por 8 escaladores nepalíes, 2 ice doctors (Nima y Ghense), 6 escaladores amigos (Norbu, Nuri, Chhepal, Furba, Lakpa y Pemba) más Carlos y yo. 6 días muy intensos de mucho peso a cuestas y de equivocarnos mucho, pero con motivación y cariño hemos salido para adelante. No es hasta el día 19 nuestra partida, Nuri Norbu Furba y yo salimos a las 7 de la mañana y en 4 horas alcanzamos el c1a 6050 mt.

Los 4 porteamos más de 30 kg, cada uno 400 metros de cuerda, escaleras, etc. Llegamos a C1 y Chhepal y Carlos ya han arrancado, para c2 a 6400 mt. El viento sopla muy muy duro, nos tenemos que tirar al suelo con las fuertes ráfagas; vamos solventando los diferentes obstáculos que el glaciar nos propone; solventando grieta a grieta y al menos hemos tenido suerte o hemos calculado bien: ha sido necesaria hasta la última escala, una vez superada la última grieta sin fondo, nos adentramos en el valle del silencio, que hoy de silencio más bien tiene poco, ya que el viento apenas deja que nos escuchemos entre nosotros, los 6 escaladores estamos remontando por primera vez está pendiente muy tendida. Norbu, Nuri, Furba, Chhepal y yo. Yo pensé que los dos Ice Doctors, nos irían a acompañar a c2, pero esta vez, o en esta expedición va a ser que no, por tanto de c1 en adelante nos quedamos 8 escaladores, Norbu, Nuri, Furba, Chhepal, Lakpa, Pemba, Carlos y yo. Seguimos ascendiendo vamos los 6 con mucho peso, y el viento sopla con mucho mayor intensidad, veo que algo no marcha bien, Carlos va sufriendo mucho, va con más de 30kg, quizás eso sea, al llegar a c2, montamos las tiendas en condiciones bastante duras.

Pasamos los 6 la noche lo mejor que podemos, Norbu, Nuri, Chhepal, Furba Carlos y yo. al día siguiente el día amanece frío, pero nuestra motivación esta tan alta, que esta vez de los 6 integrantes del grupo, tres decidimos empezar las labores entre C2 a 6400mt y C3 a7300 mt. partimos Norbu, Nuri y yo, muy muy pero que muy cargados y el resto descansa en c2. Salimos del c2, con miedo ya que igual que días anteriores nos adentramos en lo desconocido, estamos en invierno y los tres solitos, atravesamos el glaciar y a unos 6700 mt, nuestro primer problema del día, la rimaya, nos cuesta más de dos horas, visualizar, entender y después atacar el flanco más débil de la rimaya y por supuesto la más segura.  Empezamos a equipar, nos vamos relevando y alcanzamos unos 6900 metros más o menos calculo. El día es regularzillo, nos bajamos muy muy rápido a C2. al llegar a C2. Nos encontramos con Chhepal, Furba y Carlos, que están de descanso y con Lakpa y Pemba que suben más material, cada uno porta 400 metros de cuerda. portanto los 8 en C2. Estos 8 escaladores trabajaran de CB hasta C2: Norbu, Nuri, Chhepal, Furba, Lakpa, Pemba, Carlos y yo.

Pasamos una noche bastante buena, y muy unidos un equipo bueno y con muchas ganas, un equipo de esos que cada uno sabe lo que tiene que hacer, Carlos pasa la noche regular, pero para suerte de todos decidimos descansar el día 21 tras dos intensas jornadas para todos, y hay que tener en cuenta que era la 4 noche de Carlos y Chhepal en altura, no es descanso completo ya que movemos nuestro c2, de ubicación, 10 minutos caminando más arriba el c2 es un campo hostil, al menos ahora gélido y sombrío apenas 4 horas y media de sol. Algo no marcha bien, Carlos ha empeorado, hemos caminado 10 minutos y a Carlos le cuesta 5 veces más; apenas camina 6 pasos. Comunico con la base. Creo que acertamos Aitor, Carlos y yo. En su evacuación, agradecer al piloto y a Seven Summits su rapidez y agilidad en esta maniobra peligrosísima de evacuación de Carlos desde 6400mt. Un vuelo altamente peligrosísimo. Cuando oímos el heli a eso de las 16.30 yo no daba crédito a lo que estaba sucediendo; era un milagro hecho realidad, menos mal, ya que una noche más para Carlos hubiera sido muy dura y creo que no hubiera tenido las fuerzas suficientes para descender a CB. Todo el protocolo que hemos seguido ha sido duro intenso y de un desgaste altísimo. Finalmente el helicóptero pone rumbo a CB junto con Carlos y el piloto y con ello se desvanece todo nuestro plan inicial y el equipo queda muy tocado pero no hundido.

Carlos, nos has dado mucho tu motivación he ilusión y ganas de afrontar dice mucho de ti, pero como persona eres un tío grande muy grande, te echamos de menos Carlitos.  Nuestra 3 noche en c2, la expedición ha dado un vuelco, nos juntamos los 7 escaladores, y finalmente decidimos salir por la mañana, una vez sabida la situación de Carlos, se encuentra en Lukla bien y contento, eso me cuenta Aitor desde CB.  Partimos pues en la mañana del 22 hacia c3 a 7300 o 7400mt. con la intención de llegar a c3 y montarlo y dormir allí, el día es muy duro, demásiau viento pero partimos, siendo tan ingenuos de que el viento amainara.

Partimos, Norbu, Nuri, Chhapal y yo los 4, vamos nuevamente muy muy cargados y después de un gran trabajo y esfuerzo de portear y equiparnos encontramos dentro de una minúscula tienda de campaña en c3 entre 7300 y 7400 metros. con unas ráfagas de viento muy muy intensas, y con el crujido de un serak que nos está acechando. Una noche muy muy dura con mucho frío y sin poder dormir por el fuerte viento, sabemos que no va a ser sencillo, ni fácil , pero nos esperan momentos muy muy duros, la mañana del día 23 es despejada y con poquito viento, al menos esa es la tendencia, nos levantamos a las 6. Jaaa!!, Cualquiera sale del saco de dormir con la que está cayendo! Aitor y Pablo desde el base me contaron ayer que menos 30 a menos 35 y viento ligero. Claro en C3 no nos pegará el sol hasta las 11 de la mañana, y en efecto así fue. Chhepal no se encuentra bien y decide bajarse, por, tanto, nos quedamos Norbu, Nuri y yo. Salimos los tres de c3 con intención de equipar tofo lo que se pueda. Dios mío, ¡qué equivocación salir sin sol! ¡Mira que se lo digo a Norbu y Nuri!

Empezamos a escalar y apenas puedo mantener el calor en dedos de las manos y de los pies. Nos la estamos jugando. Qué hora tan larga y con el sol no os penséis que cambia mucho la cosa! . El frío es muy intenso y el viento empieza a soplar. Tanto Norbu como Nuri quieren subir a la cumbre del Sagarmatha 8848 mt. Norbu la ha escalado 7 veces, Nuri 3. Pero les encantaría hacerlo en invierno, por tanto apretamos lo dientes y los tres a una. Vamos progresando y ganando metros. Los tres escalamos sin uso de oxigeno artificial. Calculo 7500. Más tarde 7600, sobrepasamos la bandas o franjas amarillas estaremos muy muy altos a unos 7800 metros o quizás más. Nos encontramos bien contentos y muy felices de lo que estamos haciendo un equipo muy reducido, con muchas carencias para semejante empresa. Descendemos lo más rápido que podemos rapelando por las cuerdas fijas con un dolor tremendo en nuestros gemelos, y dedos de los pies principalmente. Rapelamos la rimaya y Furba se acerca a nuestro encuentro con algo de agua y té caliente. Nuestros cuerpos doloridos y maltratados lo agradecen y es tan grande el orgullo y satisfacción por el trabajo realizado que el agotamiento o cansancio parece no florecer en nuestros cuerpos.

Llegamos a C2 y Lakpa y Pemba han cocinado un dallbhat, arroz con lentejas. Joer qué pasada llegar a c2 desde 7800 y encontrarte con semejante manjar a 6400 mt. Comunico con el base y hablo por radio; Carlos está en Katmandú. Estoy contento y feliz aunque sigue en el hospital. Qué bien, ya que todo el día rondando en mi cabeza. Comemos el dalbhat y nuestros cuerpos caen rendidos como en una maldición. una maldición a la que tenemos que salir nosotros solitos. La mañana del 24 despejada como casi siempre fría pero los rayos del sol calman nuestro cansancio y hacen más llevadero estos momentos. Nos levantamos a las 8, recogemos todo. Y nos ponemos en camino los 7, Norbu, Nuri, Chhapal, Furba Lakpa Pemba y yo. Bajamos muy rápido por el valle del silencio; marcamos con cañas de bambú el glaciar. Me gusta más siempre marcarlo de descenso ya que siempre depuras en errores o trazas mejor dicho la ruta. ¡Qué contentos que vamos!

No llegará a una hora desde C2 a C1, comento que llegamos para el ‘hamaiketako’ y me emociono tengo ganas de bajar a CB, y contarles los momentos del recate de Carlos a Pablo y Aitor y si hice lo correcto. Empiezo literalmente a correr para abajo por las cuerdas fijas. Y de repente, la maldición: ¡ estamos solos solitos y la cascada se ha caído! Nadie dijo que iba a ser fácil, ni sencillo, pero sí que el compromiso iba a ser muy alto y que nos tendríamos que buscar nosotros mismos las castañas del fuego; estamos con la ruta colapsada en un sitio peligroso muy difícil. Y ¿cómo continuar con el material que tenemos? Estoy entre nepalíes. Tras hablar por Walki no hay rostros muy positivos o expectativas alentadoras. Creo que quieren regresar a c2. Oigo la palabra vivac, y sugiero, “estamos solos no?” ya que de los dos ice doctor que han currado super duro durante 6 días, Nima se ha marchado a casa y Gelchen solo no va a poder ayudarnos. Por tanto, “nos toca buscarnos la vida”. Se hace el silencio. Propongo primer plan, muy kamikaze: jugarnos el tipo pasando debajo de los seracks del Everest que escupen constantemente. Es muy poco tiempo debajo de los seraks. Finalmente lo descartamos. ¡Menos mal que el tiempo es favorable!

Me ato a una cuerda y me aseguran y trato de buscar una salida en este dichoso laberinto, tratando de escapar de esta maldición. Es una locura ¡estamos jodidos! Piensa Alex, ¡piensa! Doy con una posible salida peligrosa pero al menos no Kamikaze. Doy el relevo a Nuri y ¡por finnnn! ¡Juju! ya se acabó nuestra maldición. Pero nuestra maldición no ha hecho más que empezar. En tres ocasiones más, la cascada está completamente colapsada y nos toca buscarnos la vida. Ya que estamos los 7 solitos y lo hemos hecho una vez, ¡vamos a poder tres veces más!

Y así de sencillo lo que iba a ser una vuelta a casa sencilla ha sido todo un día de esfuerzo buscándonos la vida con los recursos e ideas que aportamos cada uno de nosotros. En la primavera hay mucha gente transitando esta cascada. A diferencia de ahora creo que 20 escaladores ice doctors se encargan del mantenimiento. Para cuando esto sucede, nosotros hoy estábamos ¡y estaremos solos! Por tanto, esto sirve de aprendizaje y de que entre c1 y cb también estaremos solos. Nadie nos dijo de que iba a ser sencillo, pero estamos aquí, ¡por la hermosura del invierno y su soledad! ¡Veremos de lo que somos capaces!

Norbu antes de llegar al último rappel me dice: ”Alex, sabes qué? Creo que hace más de 20 o 30 años que ningún occidental ha hecho lo que estás haciendo tú”. Lo pienso y creo que no será así pero le contesto que me gustaría subir allí arriba y bajar Y al bajar todos, será cuándo hayamos hecho el Sagarmata. Y para ello hay que trabajar duro muy duro. Le abrazo a él primero y después uno por uno al resto del equipo. Les agradezco su trabajo uno a uno, me emociono y les digo que creo que lo estamos haciendo bien. Eso creo. Ahora aquí es muy tarde, pero estoy muy a gusto escribiendo para todos vosotros. Os tengo aquí conmigo.

Muchas gracias!

Alex