Ya te hemos hablado de las grandes propiedades que tienen los pistachos para los deportistas outdoor. Mantener los niveles de energía es fundamental para rendir en nuestras actividades en la montaña, y más en invierno. Las actividades invernales generan unas necesidades nutricionales específicas debido al frío (el metabolismo trabaja más para mantener el calor corporal) y también a la altitud. También gastamos más energía y trabajan más los músculos al tener que desplazarnos en nieve, con esquís, etc. La debilidad, la fatiga y la hipoxia influyen negativamente en la degradación de las proteínas de nuestro cuerpo y en la pérdida de masa muscular, por lo que la ingesta de alimentos de alto contenido proteico es importante para prevenir esa degradación... ¿Y si os contamos que los pistachos tienen esa proteína que necesitamos al igual que la carne o la leche, pero de origen vegetal? ¿que contribuyen a mantener esa energía y que nos ayudan a recuperarnos muscularmente después de un esfuerzo? Así lo ha demostrado un reciente estudio de la Universidad de Illinois, que ha descubierto que el pistacho tiene proteínas completas con los 9 aminoácidos esenciales en armonía, como la carne, el pescado, la leche o los huevos, pero de origen vegetal. Es decir, equivale a la proteína vegetal de la quinoa, la soja o los garbanzos, con la ventaja de que los pistachos se pueden tomar crudos, no necesitan cocción, y eso los convierte en una opción muy práctica para llevar encima, en los bolsillos de la tercera capa o en la mochila, para poder ir tomándolos durante nuestra actividad en la montaña.
Además de ser ricos en proteína, los pistachos son una fuente de fibra, hierro, vitaminas y antioxidantes. El ejercicio en grandes altitudes también “incrementa el daño oxidativo y promueve una respuesta adaptativa del organismo, con aumento de la producción de células rojas, por lo que debemos añadir a nuestra dieta buenas fuentes de antioxidantes y alimentos ricos en hierro. De entre todos los frutos secos los pistachos son los que tienen más hierro y también más fibra, más poder saciante, por lo que son ideales para las dietas hipocalóricas porque llegamos a las comidas más saciados. Además sólo contienen 1,5 gramos de grasas saturadas y 12,5 gramos de grasa saludables, provenientes de las grasas monosaturadas y la polinostauradas.
Así que comer un puñado de pistachos al día repartidos a media mañana y a media tarde o tras la práctica deportiva, es una gran estrategia nutricional. Pero no sólo los puedes llevar en el bolsillo durante la actividad, los puedes incorporar a tus platos y a tu menú, y disfrutar de su sabor en deliciosas recetas, como nos demostró el gran chef Gerald Hirigoyen, en un encuentro virtual organizado por American Pistachos Growers. Aquí hemos seleccionado un par de sus recetas, que nos cocinó en directo desde su cocina del Restaurante “Piperade” en San Francisco.

Rodaballo cocido con sopa de pistacho
Raciones: 4 porciones
Equipo y utensilios necesarios: una cacerola grande, dos sartenes (una grande y otra mediana) para saltear, licuadora, colador pequeño, plato, bol poco profundo, cucharón, espátula, mortero y mano de mortero, plato plano de 25 cm o una fuente grande.
Ingredientes para la sopa tibia de pistacho:
- 2 cucharadas / 30 ml de aceite de oliva
- 2⁄3 taza / 75 g de cebolla picada
- 2 ramitas de tomillo fresco picado
- 1 diente de ajo
- ½ taza / 80 g de pistachos enteros
- 4 ¼ taza / 1000 ml de caldo de pollo
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
Preparación: en una cacerola grande a fuego lento mezclar el aceite de oliva, la cebolla, el tomillo, el ajo y los pistachos. Saltear durante unos cinco minutos o hasta que esté dorado. Cocinar a fuego lento durante unos veinte minutos. Añadir sal y pimienta al gusto. Al terminar, verter el contenido de la cacerola en una licuadora y remover a fuego vivo. Colar con un colador pequeño y reservar.
Guarnición:
- ¼ taza / 60 ml de aceite de oliva
- 1 taza / 120 g de cebolla picada
- ½ taza / 120 g de calabaza, pelada y cortada en cubitos
- 1 ⅓ tazas / 120 g de hinojo en rodajas
- ¾ taza / 120 g de apio, cortado en cubitos
- 2 2/3 tazas / 120 g de zanahorias, peladas y en rodajas gruesas
- 2 tazas + 1 cucharada / 500 ml de vino blanco
- 1 taza / 250 ml de caldo de pollo
- Sal según sea necesario
- Pimienta según sea necesario
Preparación: en una sartén grande, a fuego medio, combinar el aceite de oliva con la cebolla picada, el hinojo, el apio y las zanahorias. Saltear durante unos cinco minutos, añadiendo sal y pimienta al gusto. Rociar con vino blanco y dejar hervir hasta que se beba todo el líquido. Cuando el líquido se haya evaporado, añadir el caldo de pollo y seguir hirviendo hasta que se acabe todo el líquido y las verduras estén bien cocidas. Reservar.

Ingredientes aderezo de pistacho al pesto:
- 15 hojas de albahaca
- 1 diente de ajo entero
- 2 cucharadas / 20 g de patata hervida
- ⅓ taza / 50 g de pistachos enteros
- ½ taza / 100 ml de aceite de oliva extra virgen
- ½ limón en jugo
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
Preparación: mezclar la albahaca, el ajo, la patata, los pistachos y la sal en un mortero y triturar. Cuando esté triturado, agregar el aceite de oliva de forma gradual y continuar triturando toda la mezcla. Cuando los ingredientes estén totalmente integrados, agregar el zumo de limón y mezclar. Reservar.
Preparación rodaballo:
- 500 g de rodaballo fileteado, cortado en cubos
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Aceite de oliva extra virgen según sea necesario
Saltear el rodaballo con sal y pimienta en una sartén mediana y cocer a fuego medio alto durante unos 2 minutos aproximadamente por cada lado, hasta que las partes estén doradas. Cuando esté dorado colocar el rodaballo encima de un plato con un trapo de cocina, para eliminar el exceso de aceite. Verter un cucharón de sopa caliente de pistacho en un bol poco profundo, colocar las verduras y añadir unos cinco o seis dados de rodaballo por encima de éstas. Espolvorear la sopa con pesto de pistacho y terminar con un poco de aceite de oliva virgen extra sobre el plato.

Rodaballo cocido con sopa de pistacho
Crujiente de crema de chocolate con pistacho
Raciones: 4-6 porciones
Equipo y utensilios necesarios: círculo de cartón para tarta de 23 cm, molde circular de 20x5cm, dos tazones de mezcla medianos, batidora, trituradora, soplete, espátula, batidor y tijeras.
Ingredientes para la base del pastel:
- 1 taza / 160 g de chocolate amargo, triturado en trozos pequeños
- 1 taza / 123 g de pistachos enteros
- 1 taza / 80 g de obleas, desmenuzadas
- ⅓ taza / 72 g de aceite de semilla

Preparación: poner el chocolate amargo en un bol mediano y derretir al baño María. Colocar los pistachos enteros y el aceite de semilla en una trituradora y triturar a alta velocidad. Verter el contenido de la trituradora en el bol con el chocolate derretido, agregar las obleas desmenuzadas y mezclar con una espátula. Verter el contenido del bol en un círculo de cartón para tarta y repartir de forma uniforme con la espátula para formar la base del pastel. Poner en el frigorífico durante al menos 30 minutos para asentar la base.
Para la parte superior del pastel:
- 1 taza / 170 g de chocolate blanco
- 2/3 taza / 150 g de mantequilla
- ½ taza / 62 g de pistacho en polvo
- 1 taza / 230 g de nata para montar
- 1 cucharada / 8 g de azúcar en polvo
Preparación: poner el chocolate blanco y la mantequilla en un bol mediano y derretir al baño María. Con la ayuda de una batidora, montar la nata. Añadir, de forma gradual, ¼ taza (31g) de pistacho en polvo a la crema y mezclar bien. Agregar el chocolate blanco fundido y la mantequilla en el tazón y remover bien. Sacar la base del refrigerador y verter el contenido del tazón por encima de la corteza, distribuyéndola de forma uniforme y suavemente con la ayuda de una espátula. Colocar de nuevo en el refrigerador durante al menos 2 horas. Tras 2 horas, cortar con unas tijeras el círculo de cartón para tarta sobrante adaptándolo a las mismas dimensiones que las del molde circular. Con un soplete, calentar los lados del molde circular y retirar. Espolvorear el ¼ de la taza (31 g) restantes del pistacho en polvo por encima del pastel.Espolvorear ligeramente con azúcar en polvo y servir frío.

Crujiente de crema de chocolate con pistacho
Sobre American Pistachio Growers
American Pistacho Growers (APG) es una asociación sin ánimo de lucro que representa a más de 625 productores miembros de California, Arizona y Nuevo México. APG está presidida por una junta directiva de 18 miembros, que son productores, y está financiada en su totalidad por los mismos agricultores e inversores independientes, con el objetivo común de incrementar mundialmente la notoriedad de los nutritivos pistachos que se cultivan en América. Los Estados Unidos han sido número 1 en la producción mundial de pistacho desde 2008. Más información en americanpistachios.es