Cardioproteger una de las zonas más visitadas de la sierra de Guadarrama

B+SAFE se une al Reto del Maratón Alpino Madrileño para conseguir un desfibrilador

 © Sergio Prieto
© Sergio Prieto

Con la epidemia del Coronavirus han sido muchos los eventos deportivos que han sido cancelados. Entre ellos el segundo maratón de montaña más veterano de nuestro país, el Maratón Alpino Madrileño (MAM) que, junto al Cross Alpino del Telégrafo iba a celebrar su 24ª edición los días 13 y 14 de junio pasados en el corazón de la sierra de Guadarrama. En su lugar, la organización del MAM, cuya dirección técnica lleva la Agrupación Deportiva Marathon, propuso a los corredores/as el RETO MAM 2020, hacer la prueba del maratón y/o el cross por su cuenta a partir del pasado 14 de junio hasta el 31 de octubre próximo. Los deportistas pueden elegir día y hora para realizar el reto, registrando el track de su actividad y subiéndolo a una plataforma junto con unas fotos que avalan su carrera. De esta manera se irán confeccionando las clasificaciones virtuales de esta original edición sin que se pierda la carrera en 2020.

Pero este año la organización de la mítica prueba ha pensado algo más, convertirla en algo más que un reto deportivo: sumarse a la cardioprotección de los visitantes del Parque Nacional para instalar  un desfibrilador en el Centro de Visitantes que el Parque tiene en el puerto de Cotos, lugar de visita de muchos turistas y aficionados, y acceso a la cumbre más alta de la sierra, Peñalara (2.430 m), y sus famosas lagunas glaciares.

Para ello ha propuesto a los participantes del Reto MAM 2020 contribuir con parte de su inscripción, y a la ayuda se ha sumado la compañía B-Safe, filial española del Grupo ALMAS INDUSTRIES, multinacional líder en tecnologías de la salud y seguridad, y especialistas en soluciones de seguridad y cardioprotección, tanto en la comercialización e instalación como en el servicio y mantenimiento de esas soluciones.
Un desfibrilador semi automático (DESA) corrige el ritmo del corazón, realizando un electrocardiograma que analiza para valorar si es necesario proporcionar una descarga para reactivar el corazón. En combinación con la RCP (Reanimación Cardio Pulmonar), un desfibrilador ofrece la mejor oportunidad, y muchas veces la única, de supervivencia para ayudar a una persona víctima de un paro cardíaco. Pero además los desfibriladores DOC de B+SAFE están dotados con sistema de llamada a Emergencias, telecontrol, teleasistencia y geolocalización entre otros servicios para que su efectividad sea superior.
Con la recaudación obtenida por los corredores y la colaboración de B+SAFE se podrán salvar vidas en este núcleo del Parque Nacional, alejado de cualquier población y dónde el hospital médico más cercano se encuentra a 28 km de carretera y lejos de cualquier servicio de emergencia.

FOTOS ACUERDO MAM B+SAFE
FOTOS ACUERDO MAM B+SAFE


Además B+SAFE tiene un Proyecto+Vida creado para fomentar el cuidado del corazón y una cardioprotección eficaz, así como enfocar la tecnología al servicio de la seguridad y la prevención en las organizaciones. En este sentido llevan a cabo una serie de acciones como la sensibilización sobre la cardioprotección, el fomento de hábitos de vida saludables, la formación de conocimientos básicos en RCP/SVB, cardioprotección de eventos, donación de desfibriladores, donación de sistemas de seguridad para prevención, organización de eventos y talleres.

Con la recaudación obtenida por los corredores y la colaboración de B+SAFE se podrán salvar vidas en este núcleo del Parque Nacional, alejado de cualquier población y dónde el hospital médico más cercano se encuentra a 28 km de carretera y lejos de cualquier servicio de emergencia.

 

Espacios cardioprotegidos ‘conectados’

La cardioprotección es una tendencia emergente orientada a la protección del corazón en caso de episodios cardíacos. El gran número de muertes por paro cardíaco en la población ha animado a gobiernos, empresas, entidades y asociaciones a concienciar a la población y tomar medidas que permitan revertir la situación gracias a la creación de zonas o espacios cardioprotegidos. Estas zonas cuentan con, según la superficie y la afluencia de público, al menos uno o varios desfibriladores, con un adecuado servicio de mantenimiento y con personas adecuadamente formadas para poder garantizar una rápida actuación en caso de paro cardíaco repentino (para conseguir que vuelva a latir el corazón de la persona afectada), hasta la llegada de los servicios médicos de emergencia. Para que las posibilidades de supervivencia ante un paro cardíaco repentino sean óptimas, se debe realizar de forma inmediata una resucitación cardiopulmonar (RCP) que permita mantener el flujo necesario de sangre oxigenada al cerebro hasta que se restablezca el ritmo cardíaco normal mediante la descarga eléctrica suministrada por un desfibrilador.  El tiempo máximo para aplicar la desfibrilación a una persona que ha sufrido un paro cardiaco repentino es en los primeros 5 minutos.

Hay identificados cuatro pasos críticos para tratar el paro cardíaco repentino, denominados Cadena de Supervivencia:

  1. Reconocimiento y llamada al servicio de emergencia
  2. Una rápida resucitación cardiopulmonar (RCP)
  3. Desfibrilación temprana
  4. Llegada de la ambulancia y cuidados post-resucitación



Para más info: maratonalpino.com y b-safe.es