Alex Txikón irá este invierno a la Antártida

Al K2 va a ir mucha gente este invierno, pero a excepción de Urubko creo que el resto no está preparada para ello".

Alex Txikon y Antonio de la Rosa en el evento Amplía tus límites
Alex Txikon y Antonio de la Rosa en el evento Amplía tus límites

Este invierno Alex Txikon cambiará el duro invierno en el Karakórum por el verano de la Antártida. El alpinista vasco reveló sus planes el pasado jueves en el evento “Amplía tus límites", organizado por Sea to Summit y Leatherman. Hablamos con Alex de su expedición al continente helado, una tierra que le parece mágica y salvaje, y que aún conserva muchas posibilidades de ser explorada. No es la primera vez que Alex pisa la Antártida (estuvo en 2006 con Al Filo de lo Imposible), aunque es un destino y una expedición que llevaba tiempo rondándole en la cabeza. Alex y su equipo (8 personas en total) partirán el próximo 6 de diciembre hacia las islas Malvinas, de allí navegarán el pasaje de Drake hasta llegar a la península antártica.

Alex, cuéntanos el objetivo de tu próxima expedición a la Antártida

Es uno de los sitios más maravillosos del Planeta, de los más salvajes que hay, con mucha fauna, montañas por explorar… Un espectáculo de lugar al cual me apetece mucho regresar. Vamos en nuestro invierno, verano austral allí, y nuestra intención es disfrutar de una expedición con otros valores diferentes: allí no tienes el compromiso de la altura, no estás expuesto a temperaturas tan, tan frías como en el Karakorum invernal; hay otras cosas, poca información, el mar, la travesía, montañas vírgenes… Estaremos 30 días y no 50 como en el K2, es diferente… Contamos con la experiencia de la expedición a la Antártida del 2006 en "Al filo de lo imposible", donde abrimos nuevas rutas y ascendimos montañas vírgenes –como el pico Wandell–, los ocho miembros del equipo nos aventuraremos en zonas muy interesantes e inexploradas para llevar a cabo diversas actividades de primer nivel, por ahí van los tiros… No nos hemos marcado un objetivo claro, como hay mucho allí y gran parte de todo lo que hay es virgen, pues escogeremos allí. En eso consiste la gracia también, llegar allí y enfrentarte a lo inesperado. Ahora ponerme en el Google Earth, preguntar a uno u otro, no, joder, ¡pues ya veremos!

En eso consiste la gracia también de esta expedición: llegar allí y enfrentarte a lo inesperado.

¿Esta expedición ya la tenías en la cabeza?

Sí, desde muchos años atrás, y visto cómo se preparaba lo del K2 este invierno, decidí hacerla. Para mí es un tema muy bonito, aunque también nos va a hacer trabajar mucho para conseguir la financiación necesaria para ir allí. Pero vamos tranquilos, me apetece.

¿Con el K2 este invierno, no te planteaste eso de: “a la tercera vencida"?

Que no lo intente este invierno otra vez no quiere decir que no lo quiera intentar de nuevo. No, que no nos desmarcamos, ¡eh! Me gustaría dar un intentillo más al K2, un pegue más al K2 y otro pegue al Everest.

Este año anunciaste que “os pondrías en la cola", de hecho, el K2 lo van a intentar otras expediciones este invierno. ¿Cómo ves la situación?

Ahora tiene mucho interés por el K2 y las ascensiones invernales mucha gente; al K2 va a ir mucha gente, pero a excepción de Denis Urubko creo que el resto de la gente no está preparada para ello. Nosotros tenemos experiencia, y el K2 no es cualquier cima... Una cosa es cuando hicimos en el año 2011 una expedición invernal también al Karakorum, pero al Gasherbrum I , no al K2... Mucha gente quiere estar ahí, pero estar ahí no significa que tengas una mínima oportunidad de ascender a esa montaña.

Mucha gente quiere hacer el K2 invernal, pero estar ahí no significa que tengas una mínima oportunidad de ascender a esa montaña.

Muchos han llegado a 7.500 pies y no tienen esa experiencia detrás… Sí, sí, que está muy bien, el año pasado ocurrió lo mismo, pero para el éxito de una expedición así se tiene que trazar una línea perfecta. Estas ascensiones hay que hacerlas rápido, se trata de velocidad, de minimizar riesgos… y además yo creo que muy poca gente -y Denis es uno de ellos- está pensando en cómo afrontar la ascensión de verdad. En cómo ejecutar esa expedición, esa cumbre alpinísticamente. Muchas veces se habla sólo de llegar a la cima pero no de cómo hacerlo, de cómo llegar. Y esto no es una crítica ni mucho menos a las otras expediciones. La montaña está ahí para todos, y ahora tienen mucha repercusión mediática todas las expediciones invernales y en estilo alpino, la gente quiere probar, intentarlo, y es normal, la montaña es de todos, todo el mundo tiene el mismo derecho de intentarlo. Tengo esa opinion debido a mi experiencia, como especialista en expediciones invernales, y creo que hemos regresado de todas las expediciones en las que hemos estado desde 2011 hasta ahora. No somos unos mindunguis, con el bagaje que tenemos algo podemos decir de esto. Y, ¿vamos a estar ahí, en el plató del Tíbet otra vez este invierno con uno de aquí, otro de allí, con expediciones comerciales que llevan a gente sin experiencia…? No. Ya tuvimos problemas con los rusos el año pasado como para volver con ellos, no, no queremos arriesgarnos a que se repita algo parecido. (Alex se refiere a la expedición ruso-kazajo-kirguís liderada por Vassilo Pivtsov con la que coincidió en el campo base del K2, pero a quienes acusó de no querer compartir trabajo en la equipación y de no estar técnica ni físicamente preparados y de crear mal ambiente de competitividad, además de dejar casi 30 kg de basura sin recoger).

Alex Txikón cambia este invierno el K2 por la Antártida

Alex Txikón y Alí Sadpara en el Nanga Parbat

Fuisteis un poco pioneros en esa idea de los intentos invernales

Fuimos los pioneros aunque la gente no lo quiera ver, aunque algunos medios nos han intentado desprestigiar… Por ejemplo, este otoño están en el Everest un montón de polacos, Kilian (Jornet), y a todos les ha llevado abrir la cascada del Khumbu 20 días. A nosotros nos costó cuatro días de trabajo el segundo Everest y el primer Everest diez… Hay una dificultad, peligro de seracs... Pero a ellos les ha nevado, y a nosotros el viento nos tiraba los seracs encima, ¿me entiendes? Entonces los datos están ahí, yo creo que no miento, creo digo las cosas con objetividad, pero luego nadie lo valora, o lo valora el que de verdad sabe. Cierto sector ha intentado desprestigiar la expedición… Está claro que nosotros sabemos lo que hacemos, y sabemos que en tres días tardamos en equipar y llegar hasta los sietemil pies, y nos movíamos a día por campo, Salíamos por la noche y tardábamos cuatro horas en llegar del campo base al campo 1, y lees por ahí a otros medios hablando de “los fortísimos alpinistas rusos", y tardaban no menos de 15 horas de campo a campo. Pivtsov, el que terminó los catorce, el líder, tardaba 9 horas… Pero aquí no estamos para correr, que los campos no son metas volantes… Aquí no se miden las cosas por velocidad. Mientras a un equipo le cuesta 4 días de trabajo llegar al campo uno a otro le cuesta seis horas, pues vale, pero hay que hacer las cosas bien y estar preparado para afrontar una ascensión invernal al K2. Al final las cosas caen por su propio peso…

La verdad es que la expedición pasada al K2 fue bastante dura, además cuando estabais inmersos en la ascensión, acudistéis al rescate de Tom Ballard y Daniele Nardi en el Nanga Parbat…

Son cosas que creo que hay que hacerlas, uno tiene que estar centrado en su proyecto, pero en la montaña, cuando a otro le vienen mal dadas, sobre todo a gente cercana o a gente no tan cercana, como es el caso, pues creo que todo el mundo merece respeto. El que no hayas tratado con unas personas o no te lleves muy bien, no significa que sus familiares no merezcan un mínimo de respeto de buscarles.

El que no hayas tratado con unas personas o no te lleves muy bien, no significa que sus familiares no merezcan un mínimo de respeto de buscarles.