Técnica

Los peores errores que puedes cometer al comprar tu mochila

¿Cómo de fácil es equivocarnos al comprar nuestra mochila? Pues más fácil de lo que creemos, te contamos la media docena de equivocaciones más comunes.

Tino Nuñez

3 minutos

Los peores errores que puedes cometer al comprar tu mochila

Para la de numerosas veces que nos va a acompañar nuestra sufrida mochila… ¡qué poco tiempo le dedicamos a elegir la más adecuada! Repasamos los
errores más imperdonables.

Demasiado ultraligera

La nueva categoría de mochilas ultraligeras, conocidas por algunos especialistas como “mega ultra ligeras” carecen de acolchado en la espalda y en las hombreras, por lo que el conjunto tiende a plegarse cuando superamos los 3 o 4 kilogramos de carga y a hacernos daño. Popularizadas en algunos vídeos, suelen corresponder a capacidades para un día o día y medio, en torno a los 35 litros y pueden hacernos creer que llevar una carga de 7 a 10 kilogramos resultará cómodo, cuando nada más lejos de la realidad. Además, los tejidos demasiado finos raramente aguantarán abrasión contra las rocas (en especial la cubeta) o ramas y zarzas.

Muy pesada en vacío

Existen modelos con acolchados muy gruesos e innumerables bolsillos y porta accesorios que pueden sumar tanto peso que nuestra mochila de 50 o 60 litros alcance los 2,5 o casi 3 kilogramos en vacío ‘un auténtico “armatoste”, que quizá llame tu atención por su cinturón lumbar súper ancho o su gruesísimo tejido pero que resulta muy poco práctico por su gramaje total.

Capacidad muy reducida

En las últimas décadas se ha reducido en más de un tercio el volumen de las mochilas que utilizamos en montaña, estupendo para no sobrecargarnos y mejorar nuestra movilidad o ritmo de progresión, pero a veces excesivamente si nos obliga a dejar en casa prendas de protección o buena parte del agua. Salvo deportistas muy técnicos, como corredores de montaña o alpinistas, junto a muchas personas con una mochila minúscula siempre hay un/a acompañante con mochila más grande y que lleva lo que no le cabe al “minimalista”.

¡Enorme!

Las personas que comprnr una mochila muy grande en general cometen el error de pensar que con un solo modelo podrán hacer todo tipo de salidas (incluidas las de medio o un día) o que casi siempre la llenarán con lo que creen prácticamente imprescindible. Son el blanco perfecto para que algunos de sus acompañantes con mochilas demasiado pequeñas les pidan meter su saco de dormir, una chaqueta, el agua, el hornillo o cualquier otro objeto. Debido a su tamaño es fácil que si no se llenan del todo, la carga se desplace en l interior, perjudicando la estabilidad del conjunto mochila+porteador/a y el equilibrio en terreno complicado. Casi con total seguridad tu mochila no necesita ser de 70 litros aunque salgas en autonomía total para una semana y puedas arreglarte con una de 50 litros.

Confiar demasiado en las de bajo coste

Cada vez es más común encontrar a la venta mochilas de bonito aspecto y acabado aparentemente similar a las más caras por la tercera parte de precio. Evidentemente la calidad del relleno, la longevidad del tejido y la comodidad del conjunto espalda+hombreras no será la misma, pero es en las costuras donde pueden aparecer los mayores problemas. En no pocas ocasiones puede llegar a arrancarse una hombrera, ceder el asa de elevación, la sujeción del cierre de la seta o entreabrirse las costuras del interior en cuanto llenes la mochila del todo. Personalmente nunca me iría a un objetivo ambicioso, por ejemplo una transpirenaica o un trekking al Himalaya, con un producto de bajo coste.

Comprar una mochila grande sin probártela

Las mochilas pequeñas, de 10 a 30 litros, rara vez dan problemas serios de tallaje aunque las compres on line y no puedes probártelas antes, pero las de una cierta capacidad, entre 45 y 60 litros, es fácil que no se adapten bien a la longitud o curvatura de tu espalda, que presenten unas hombreras demasiado separadas o excesivamente próximas o que el cinturón lumbar se sitúe a una altura inadecuada. Tampoco resulta muy elegante hacerle perder al tiempo a un vendedor en una tienda física, probándonos varia yas sabiendo de antemano que vamos a comprar la misma on line sólo por unos pocos euros menos. Si tu mochila va a tener un cierto volumen compra sólo en tiendas físicas y con buen asesoramiento, no lo lamentarás.