Técnica

Hacernos la vida más fácil en verano: comodidad en la montaña

A la mayoría no nos gusta sufrir inútilmente en la naturaleza. ¿Cómo podemos mejorar nuestra comodidad en la montaña?

Tino Nuñez

4 minutos

Hacernos la vida más fácil en verano: comodidad en la montaña

Ya sabemos que por mucha experiencia que tengamos en la naturaleza, siempre habrá momentos poco confortables o de desánimo, pero hacernos a menudo la vida más fácil no resulta tan complicado ¿empezamos este mismo verano a intentarlo?

LA GUERRA DEL PESO
Ir los más ligero posible no sólo es una tendencia deportiva, también es una forma sensata de disfrutar en actividades que impliquen muchas horas de esfuerzo. Ese ahorro de carga en la mochila no se consigue sólo invirtiendo dinero en productos que pesan la mitad o la tercera parte, sino también racionalizando qué llevamos entre todos y no sobrecargándonos para proteger a nuestra pareja o compañeros/as. ¿Cuántos senderos maravillosos no habremos recorrido maldiciendo nuestra mochila mientras quea nuestro lado pasan personas de mucho mejor humor por ir más ligeras? Una de nuestras mejores armas será tener en casa una báscula de cocina en la que pesartodo nuestro equipo, para tener un conocimiento realista de qué es preferible llevar encima en función del tipo de la actividad. Atención a los gramajes “oficiales” declarados por parte de los fabricantes o tiendas on line en tiendas de campaña, sacos de dormir o calzado, porque hay sorpresas desagradables.

BENDITA AGUA
Puedes tener un mal recuerdo de tu mejor actividad simplemente porque no has gestionado de forma eficaz el agua necesaria. Por ejemplo, en verano no resulta raro necesitar hasta 2 litros de agua diarios, volumen que rara vez se lleva encima confiando quizá demasiado en que algún punto de abastecimiento encontraremos (supuesto un tanto ingenuo si no nos hemos informado previamente). Unas simples pastillas potabilizadoras y que sean eficaces contra bacterias y virus o esconder a la ida parte del agua de nuestra mochila que podamos necesitar a la vuelta son medidas que funcionan para no quedarnos cortos en hidratarnos.

ROPA MÁS CONFORTABLE
No toda la vestimenta de montaña que se comercializa tiene un tacto agradable o transpira lo suficiente. Con temperaturas elevadas, cercanas o superiores a los 30 grados buena parte de las camisetas técnica de poliéster y las chaquetas impermeables son poco confortables, ya sea por ofrecer una sensación demasiado antinatural cuando toca nuestra piel o incluso condensar. Aunque hay quien se lleva las manos a la cabeza cuando se citan alternativas tradicionales para ocasiones puntuales, puede mostrarse mucho más agradable llevar una camiseta de algodón orgánico o sujetar un paraguas en un chaparrón estival que recurrir al equipo ortodoxo de montaña.

La ropa elástica resulta más agradable que la convencional sólo si el patronaje está bienestudiado, carece de costuras voluminosas y ofrece una alta transpirabilidad (algo que no siempre ocurre incluso en prendas de de precio elevado).

De la elegancia y la popularidad del color negro ya hemos hablado muchas veces, pero nos cuesta reconocer que es inadecuado para la montaña, por la poca visibilidad que nos aporta en caso de extravío o accidente, además de que absorbe demasiado calor en jornadas estivales soleadas. En Los Alpes se han retrasado tanto la localización de accidentados vestidos de negro que en algunos casos ha conllevado la muerte de esas personas.

PEQUEÑOS TRUCOS PARA NUESTRA PIEL
Entre los que pasan más desapercibidos están:
- Utilización de cremas específicas para pies (antiampollas) y pliegues de la piel (antifricción y reparadoras para ingles o axilas).
- La mayoría del calzado ligero de montaña dejará pasar algunas espigas secas o ramitas cuando atravieses prados secos y notarás un picor desagradable en los pies cuando queden retenidos en tus calcetines. Si el tramo no es muy largo, puede interesarte quitarte justo antes los calcetines y caminar sin ellos, paraluego volver a ponértelos en terreno más limpio.
- Preferir protección solar de factor 50, tanto para la cara como para los a menudo olvidados labios., no conformarnos con productos de baja calidad y precio reducido que adquiramos para salir del paso en supermercados y gasolineras.

DOS PRODUCTOS QUE FUNCIONAN
Solemos adquirir artículos nuevos sobre todo cuando la utilización de los que ya tenemos nos ha causado molestias importantes, pero desde el principio podemos prever que ciertos tipos de avances en el material nos proporcionan más comodidad. Las colchonetas híbridas, de tipo inflable pero con múltiples compartimentos, se muestran mucho más confortables y estables para dormir en el suelo que las autoinflables o las económicas de “piquitos” tan populares. No mucha gente sabe que buena parte del calzado de montaña acostumbra a venir de fábrica con unas plantillas demasiado finas o poco longevas y que pueden ser fácilmente sustituidas por unas de gel mucho más amortigüantes y agradables, que hasta evitarán inflamaciones o dolores innecesarios por apenas 25 o 30 euros.

LA EXCEPCIÓN
Aquí entramos ya en aspecto más “filosóficos”, no siempre sopesados en estos tiempos tan tecnificados y acelerados. Si tienes que elegir entre comodidad y libertad, elige libertad, porque de lo contrario acabarás perdiendo vivencias muy valiosas. Los aficionados a la montaña que sobrevaloran la comodidad, acaban por repetir excesivamente enclaves y actividades ya conocidos, no dejan lugar para el descubrimiento personal ni la sorpresa, sobrevaloran los destinos rápidos y lo que es peor: cualquier pequeño contratiempo parece arruinarles el día. Nuestros padres sufrían todo tipo de incomodidades y buena parte de las molestias que aparecen en montaña –como mojarse o extraviarse durante un breve lapso de tiempo- son perfectamente tolerables y suelen conllevar recompensas inesperadas ¡no es tan grave alguna pequeña molestia o que todo no resulte amable. Tampoco es imprescindible regresar siempre pronto para comer en un restaurante o dormir sólo en refugios, deja espacio para la improvisación responsable y para un contacto más continuado o íntimo con la naturaleza.