Hacía ya unos años que The North Face decidió dar un paso adelante y desarrollar su propia membrana. Sus necesidades al respecto eran obviamente las de todos los deportistas de montaña: lograr que sus prendas soportasen condiciones meteorológicas invernales, pero con un elevado grado de transpirabilidad. Lo de siempre, pero que no es tan fácil… sobre todo si además quieres que las prendas no pierdan durabilidad, ligereza y comodidad. Y encima añadiendo un componente de sostenibilidad a la ecuación, con un 90 % de materiales reciclados. Un poco como la cuadratura del círculo de las prendas técnicas de montaña. ¿Lo consiguieron? Pudimos comprobarlo de primera mano durante la presentación celebrada en Chamonix el pasado año, cunado la marca americana celebraba el lanzamiento de su Futurelight, quizá la membrana más avanzanda del mundo.
Para asegurar eso todavía faltan muchas pruebas (por ejemplo, conocer su verdadera durabilidad) pero por el momento podemos afirmar que han logrado su objetivo y que la nueva línea de novedades con su membrana está siendo un éxito de ventas y críticas. Unas de esas recién llegadas son las Activist Futurelight TM, unas zapatillas de trekking diseñadas para ofrecer un gran rendimiento en la montaña y, además, cumplir en el día a día fuera de ella. A ello ayuda mucho un diseño discreto y moderno, más urbanita que alpino.
Disponible en altura baja y en media caña, la bota ofrece una mezcla equilibrada de confort y rendimiento técnico. La impermeabilidad y la transpiración vienen logradas, claro, por la membrana que les da nombre. También cuentan con una lengüeta reforzada y plantillas OrthoLite® para ofrecerte comodidad durante todo el día. Estas plantillas ligeras y lavables conservan sus propiedades de amortiguación durante mucho tiempo, incluso si se usan a diario. También tienen la puntera reforzada, lo que resulta útil al ir deprisa cuesta abajo o para caminar en terrenos pedregosos en condiciones de escasa iluminación. Por último, su suela EXTS™ proporciona un agarre firme y seguro tanto en superficies mojadas y resbaladizas, como en suelo seco y terrenos pedregosos. Sus pesos oscilan entre los 296 gramos y los 393, según modelo y talla. Su precio ronda los 130€, nada exagerado si tenemos en cuenta que se trata de lo último en tecnologías de The North Face. Casi nada.