Los alpinistas franceses Paul Bonhomme y Vivian Bruchez lograron esquiar el pasado 19 de junio la Nant Blanc, la famosa cara NE de la Aiguille Verte del macizo del Mont Blanc, por una vía de 1.100 metros que corta la pared diagonalmente por terreno de 55 º y 3 rápeles en la sección inferior.
«Enfrentarse a esta inmensidad es a veces desconcertante, una mezcla de libertad y compromiso», escribe Vivian en su post.
Siguiendo las huellas del legendario pionero Jean-Marc Boivin que esquió la línea ya en 1989, y del veinteañero Marco Siffredi que hizo lo propio en snowboard una década después, Bonhomme y Bruchez esquiaron la que está reconocida como uno de los descensos extremos más míticos del macizo del Mont Blanc.
En palabras de Vivian: ***“Qué simbólico que es rendir homenaje a los pioneros del alpinismo y el esquí siguiendo sus huellas".***
Ambos se encordaron en la travesía que usaron Pierre Tardivel y Stéphane Brosse en junio de 2009 y ya en el descenso se desviaron hacia la extraordinaria ruta establecida por Armand Charlet y Camille Devouassoux el 3 de julio 1928.
En una línea claramente visible desde Chamonix, Bonhomme y Bruchez ascendieron por la clásica vía Cara Norte Charlet Platanov, con algunas de las variaciones Tardivel, para llegar a esquiar una línea histórica en el Macizo.
***“Para mi quedará como un momento suspendido en el cielo, un momento de pausa que la montaña nos ha ofrecido permitiéndonos pasar"***, concluye el esquiador francés.