El sueño del K2 se disuelve. Es cierto que era un sueño gélido y poco probable, pero si alguien podía echarle el guante eran estos resolutivos polacos, firmes en las montañas y en su convicción de darle un broche de oro a su tradición invernal en los Himalayas.
Pero esta mañana se anunciaba el final de la expedición tras el último reconocimiento llevado a cabo por Adam Bielecki y Janusz Golab, que llegaban al canpo base avanzado para encontrárselo devastado por las tormentas.
Estas son las razones que ha expuesto Wielicki, el líder de la expedición, para dar por concluido el histórico intento:
Basándonos en un profundo análisis de la situación, he decidido poner fin a las acciones en el K2. Los factores que me han llevado a tomar esta decisión son los siguientes:
1. El restultado del último reconocimiento. Ha resultado que en el camino hacia el C1 todas las cuerdas se encontraban bloqueadas y las tiendas dañadas. También hay una alta posibilidad de que haya sucedido lo mismo en el C2 y el C3.
2. El pronóstico meteorológico solo confirmaba una ventana de buen tiempo para, aproximádamente, el 11 de marzo.
3. No hay posibilidad de aclimatación para los equipos. Podría hacerse noche sobre los 7.200 metros, pero su regreso antes del ataque definitivo sería después de ese día 11.
4. Hay mucha amenaza de avalancha en la parte superior de la monotaña. En los últimos 8 días hemos registrado más de 80 pulgadas de nieve.
5. Se advierten pésimas condiciones, con precipitaciones, a partir de los 7.600 metros.
6. Muy malas previsiones para los días posteriores al 11 de marzo.
Nuestra prioridad es la seguridad de los expedicionarios.
Les deseamos un feliz regreso, un fantástico descanso con sus familias y un año de buenos entrenos hasta el siguiente invierno...