Sin prisa pero sin pausa. Esta es la máxima para entender los severos trabajos que requiere equipar un ochomil en invierno, sobre todo cuando hablamos de dos de las montañas más peligrosas del mundo, el K2 y el Nanga Parbat, y de la más alta, el Everest. Tres de los iconos del alpinismo mundial ya se ven asediados por el empuje humano en su momento más exigente.
Alex Txikon, Ali Sadpara y sus compañeros locales ya fijaron toda la ruta hasta el primer campo de altura en el Everest, situado a 6.050 metros y los últimos detalles que llegan desde el Campo Base es que la expedición estaría de camino al Campo 2, habiendo superado ya los 6.280 metros de altitud según el tracker de Alex. Parece que todo marcha mejor de lo planeado, posibilitando más tiempo de descanso entre los esfuerzos, algo que puede ser definitivo de cara al ataque final a la cima.
En el K2 los primeros miembros de la expedición polaca ya han partido del Campo Base para comprobar las condiciones de la ruta. Las primeras dificultades vienen por los problemas de comunicación a causa de un fallo en su conexión vía satélite. Se sabe que todo el material ya ha llegado al CB y que un primer envite se ha lanzado para tratar de alcanzar el primer campo de altura.
La comunicación también está siendo un hándicap para la expedición al Nanga Parbat, que podría ser la segunda de la historia que logra la cima en invierno. Tomek Mackiewicz y Elisabeth Revol ya se encuentran aclimatados y han llegado a establecer el tercer campo de altura (C3) en un momento muy temprano de la expedición, alcanzado los 7.300 metros. La cordada, a pesar de apenas poder enviar mensajes, agradece el multitudinario apoyo que están recibiendo, aunque se lamentan por no poder responder prácticamente a nada. Por ahora, descansarán en el campo base mientras pasa una racha de fortísimos vientos en la montaña.
A continuación os dejamos los partes meteorológicos previstos para los próximos días en las tres montañas. ¡Suerte a todos!