El escalador alavés, Alberto Zerain, ya está en Nepal con el objetivo de escalar la cima del Manaslu (8.163 metros), el que sería su noveno ochomil, con el apoyo de Saunier Duval y su Servicio Técnico Oficial. Tras alcanzar la cima del Dhaulagiri (8.165 metros) la pasada primavera, busca ahora escalar una nueva cima, la octava más alta del mundo, en la que volver a realizar “una ascensión limpia, rápida y lo más autosuficiente posible”. “Me encuentro en un buen estado de forma y con mucha ilusión de volver a disfrutar de las grandes montañas”, explica Zerain, a la vez que mantiene vivo el proyecto 2x14x8000 en el que acompaña a Juanito Oiarzabal en su intento de repetir por segunda vez de las 14 cimas más altas del planeta.
En este reto coincidirá de nuevo con el montañero argentino, Mariano Galván, con el que realizó el ataque final al monte Dhaulagiri y que culminó con la llegada a la cima el pasado 19 de mayo. “Los dos juntos podemos hacer algo diferente: más exigente, más duro y más estético. Así que me alegra mucho compartir con él el trekking de aproximación, el campo base y si toda va bien, la cima”, señala Zerain.
La expedición comenzará con un trekking de ocho días por los valles del Burhi Gandaki atravesando monasterios budistas, pueblos aislados y empinadas laderas. El collado Larkya, con 5.135 metros será la altura máxima alcanzada durante los días de aclimatación hasta la llegada al campo base (4.700 m.) prevista para el 13 de septiembre.
A partir de entonces concretará todas sus energías en la instalación de los diferentes campos de altura hasta el ataque final a la cima. “Lo más probable es que ascienda por la vía normal, la vía Noreste, la utilizada por los japoneses en su primera ascensión de 1956, aunque no descarto probar también la última ruta abierta en la montaña en el año 2006 por Denis Urubko y Serguey Samoilov. Una vía mucho más directa y exigente que todavía nadie ha repetido”. No será hasta la llegada al campo base cuándo decida los planes definitivos. En torno al 15 de octubre debería realizar el ataque a cima, si las condiciones climatológicas lo permiten y se cumplen todos los planes previstos desde casa.
“Lo que sí tengo claro es que realizaré una ascensión diferente: rápida, exigente y, en la medida de lo posible, autosuficiente”, señala el escalador alavés que a sus 55 años suma ya ocho cimas de más de ochomil metros, además de grandes retos en solitario por las paredes más exigentes del Himalaya.
La ruta japonesa
La ruta japonesa recorre la cara Nordeste del colosal macizo del Manaslu. Los primeros tramos de la vía suponen recorrer un agrietado glaciar y exponerse a la caída de los seracs (bloques irregulares de hielo) de las laderas cercanas hasta los 5.600 metros donde se instala el campo I en el collado Naike.
A partir de este punto, se flanquea el cono glacial hasta los 6.200 metros del campo II. El siguiente campo ya se encuentra a los 7.000 metros, tras superar una cascada de 70 grados de inclinación. El último tramo exige superar una rampa de 1.000 metros de desnivel que finaliza en una larga arista hasta la cima. Los riesgos de desorientación, los problemas derivados de la altura y los fuertes vientos hacen de este “ochomil” un monte duro, exigente y muy dependiente de las buenas condiciones climatológicas.
El superar todas estas complicaciones es lo que más motiva a Zerain. “Disfruté tanto en el Dhaulagiri con Juanito Oiarzabal que necesito volver a las grandes montañas para mantener el buen estado de forma”.
Alberto Zerain (Vitoria-Gasteiz, 1961) alcanzó en primavera con el Dhaulagiri (8.167 metros), su octavo ochomil. Su primera expedición al Himalaya fue en 1993 cuando se convirtió en el primer alavés en escalar al techo del mundo, el monte Everest (8.848 m.). Después escaló el Makalu (8.465 metros) en el año 1995, donde coincide por primera vez con Oiarzabal en una expedición. La escalada de esta cima la realizó en solitario desde el campo 3.
Después llegaron el Lhotse (8.516 m.) año 2001, GI (8.080 m.) y GII (8.034 m.) en 2006. El K2 (8.611 m.) lo escaló en solitario en 2008, el mismo día que fallecieron en la montaña 11 personas y en toda una demostración de fuerza y resistencia.
El último fue el Kangchenjunga (8.586 m.) en 2009. Entre tanto, ha intentado el Everest por el corredor Honrbein y en Nanga Parbat por la Arista Mazeno. Ahora, forma cordada con Juanito Oiarzabal en su reto personal de repetir los 14 ochomiles por segunda vez dentro del 2x14x8000 junto con Saunier Duval y Servicio Técnico Oficial y mientras Oiarzabal se recupera de las molestias de salud generadas en el Dhaulagiri, Zerain entrena fuerte con nuevas montañas como el Manaslu.