Llevan casi 600 km recorridos, han bregado con el frío extremo, superado algunos delirios provocados por el cansancio… y aún les queda la mayor parte de su odisea por delante. Ryan Sandes y Ryno Griesel se encuentran en pleno intento de establecer el mejor tiempo conocido (Fastest Known Time) del Great Himalayan Trail; es decir, un total de 1.400 kilómetros por el corazón gélido del Himalaya.
Su plan es superar la mítica ruta en un máximo de 28 días. Aún les restan 16 jornadas de esfuerzos por delante, pero ya acumulan un buen colchón de tiempo sobre la anterior marca conocida, establecida por Andrew Porter en 2016. Le sacan alrededor de 150 km de diferencia en las mismas etapas recorridas. Porter necesitaba de 28 días, 13 horas y 56 minutos.
El Great Himalayan Trail es una combinación de varias rutas como la High Route o la Cultural Route, que unen los diversos distritos de Nepal del oeste al este. Pero el trazado que recorren Ryan y Ryno es libre, navegando a su manera para encontrar la mejor línea de progresión posible… siempre que pasen por los mismos checkpoints establecidos por Porter en octubre de hace dos años.
Foto: Red Bull Content Pool
Compromiso en Dolpa
La pareja de ultrarunners se han internado en una de las regiones más remotas de Nepal, la región de Dolpa, donde se están encontrando con las dificultades propias de aquel terreno de aventura, llegando a tirar de cuerdas y piolets para superar algunas secciones. Esta parte es otro nivel. “Ha sido muy frenético”, explica Ryan Sandes. “Con todas las nieves tardías y el hielo, la progresión ha sido realmente lenta. Pero estas condiciones hacen que la aventura sea mucho más real y épica”.
“Tuvimos que abrirnos camino entre hielo y nieve, un desafío total para la mente”, confirma Ryno, que ha tenido que ser tratado por congelaciones en sus dedos por manejar el GPS sin guantes. “Si no hubiéramos encontrado un monasterio donde pasar la noche, creo que nos hubiésemos congelado hasta la muerte”, apunta Sandes.
Tras recorrer la región de Dolpa, su siguiente escenario será el de los Annapurnas. “Estoy muy motivado con esta parte. Hay más gente, más infraestructuras y es una parte realmente bella de Nepal”, concluyen Ryan Sandes, claramente feliz por superar una de las zonas más comprometidas del recorrido.
Podéis seguir los progresos de Ryan y Ryno en la ruta en tiempo real en el siguiente enlace.